El Ayuntamiento de Marbella ha reconocido este sábado, a título póstumo, la trayectoria de Antonio de Sola en los ámbitos del deporte y del turismo con la asignación de su nombre a una plaza de la ciudad, situada en la confluencia entre calle Vázquez Clavel y Vicente Blasco Ibáñez.
La alcaldesa, Ángeles Muñoz, ha presidido el acto junto a familiares y amigos del homenajeado y ha señalado que "nos hemos reunido para recordar a una de las personas que han marcado para bien la historia de nuestra ciudad". De hecho, ha destacado en un comunicado que "el legado de De Sola en los ámbitos mencionados ha contribuido a cimentar la Marbella de hoy".
"Desde que llegó a nuestra ciudad, en 1968, tuvo claro que lo suyo era arrimar el hombro para contribuir a la prosperidad de la ciudad", ha indicado la regidora, quien ha recordado que "no se conformó con ser mero espectador de los acontecimientos y se involucró en primera persona con el mundo deportivo y con el sector turístico". Además, fue concejal en la primera Corporación democrática de Marbella, en 1979, y cultivó la escritura y la poesía.
"Hoy todos nos unimos para reconocer una vida de generosidad y compromiso con Marbella, y qué mejor homenaje que darle una plaza junto al estadio de fútbol donde sufrió y disfrutó a partes iguales con su equipo", ha apuntado.