La actuación de un taxista de Sevilla fue clave para localizar al Citroën C3 implicado en el atropello de una motocicleta y cuyo conductor se encuentra en estos momentos en estado crítico. Tras presenciar los hechos y ver cómo huía del lugar, el taxista le persiguió por las calles del distrito Cerro-Amate, persecución que quedó grabada y que ha sido "fundamental" para la investigación policial del siniestro vial.
Según ha relatado Emergencias Sevilla en sus perfiles de redes sociales, en la noche del domingo se produjo una colisión entre un turismo y una motocicleta en la confluencia de la Ronda del Tamarguillo con la calle Marqués de Pickman. Como consecuencia de esta colisión, un motorista de 47 años de edad sufrió lesiones de gravedad siendo hospitalizado en la Unidad de Cuidados Intensivos de un hospital de la capital. Continúa en estado crítico.
El turismo causante de la colisión, lejos de detenerse para auxiliar al motorista, se ausentó del lugar dándose a la fuga, relata la Policía Local.
Es en este punto "donde entra en juego la valiente y decidida intervención de un taxista de Sevilla, de mediana edad", apuntan. Venía circulando con su taxi por la Ronda del Tamarguillo cuando es adelantado por el turismo protagonista del suceso. Detenidos en el semáforo del cruce con la calle Marqués de Pickman, el turismo en cuestión que circulaba por el carril izquierdo, trata de dirigirse hacia la calle Federico Mayo Gayarre, para lo que cruza los tres carriles y es en el carril de la derecha cuando intercepta la trayectoria del ciclomotor, saliendo proyectado su conductor hacia adelante y cayendo sobre la calzada.
Todo esto, es captado por la cámara embarcada que el taxi tiene instalada en su interior y que va captando las imágenes del exterior.
Tras la colisión, el taxista, al ver que el turismo se da a la fuga, inicia su persecución callejeando por las calles del barrio de la Candelaria y llegando a las inmediaciones del Cerro del Águila y dirigiéndose hacia calle Ingeniero la Cierva, donde le pierde el rastro.
El teniente alcalde delegado de Gobernación, Juan Carlos Cabrera, ha felicitado al taxista por su “decidida y valiente actuación al no dudar en salir en persecución del conductor fugado. Una clara muestra de la vocación de servicio público que tiene el colectivo del taxi en Sevilla.”
Durante este trayecto, la cámara de seguridad fue grabando la conducción temeraria del conductor fugado. De las imágenes captadas por este sistema, los agentes lograron extraer de un fotograma la matrícula del vehículo interesado. Tras esto todos los efectivos comenzaron a rastrear las zonas de interés para tratar de localizarlo.
Resulta que el vehículo fue sustraído en noviembre pasado en Madrid, del interior de los aparcamientos de una empresa de alquiler. Junto a este vehículo, sustrajeron otro pero fue devuelto pasadas unas semanas.
Momentos después del accidente se difundió en los canales oficiales en redes sociales de Emergencias Sevilla, la información disponible para tratar de localizar al turismo gracias a la colaboración ciudadana. En unas 15 horas, superaba un millón de lecturas entre todas las publicaciones realizadas en los citados canales oficiales. La colaboración ciudadana ha sido fundamental.
La Policía Local y Policía Nacional dispusieron una operación cierre en la capital, apoyada por el Centro de Control de Tráfico de la DGT en Sevilla y Guardia Civil. Durante toda la noche, gracias a la monitorización de la DGT, se tuvo la certeza que el vehículo no había circulado por la SE-30 y por lo tanto se encontraba en el interior de la ciudad.
Cabrera ha destacado “la perfecta coordinación y colaboración de las diferentes administraciones que han participado en este operativo para localizar al vehículo fugado, con la certeza que el equipo de investigación de la Policía Local dará con el conductor para ponerle a disposición judicial.”
A media mañana se difundía la matrícula del vehículo y alrededor del mediodía era localizado el vehículo estacionado en la calle Padre Pedro Ayala, en el barrio de Nervión.
En estos momentos se encuentra depositado en los almacenes municipales para ser procesado por efectivos de Policía Científica para extraer las evidencias suficientes que permita acotar la identidad de la persona que conducía anoche el vehículo.