El Xerez CD ha anunciado este jueves la reducción de la deuda con los acreedores ordinarios en cinco millones de euros. Tras varios meses de negociación, el Juzgado de lo Mercantil ha aprobado la modificación de esa propuesta de convenio de acreedores, que estaba en unos siete millones y que se reduce a dos. Este paso no afecta a los otros acreedores, los privilegiados (Hacienda, Seguridad Social…etc.) con los que se mantiene el estado actual de una deuda de unos quince millones.
Juan Luis Gil destacaba que esta es “la mejor noticia de los últimos diez años en este Xerez CD de tanta lucha y tantas piedras en el camino. Estamos luchando a muerte por nuestro equipo y mientras haya un hilo de esperanza aquí vamos a estar”.
Por su parte, José Cepero, del Bufete Cepero i Salido, explicaba este movimiento de “sacar al Xerez CD del coma en el que estaba sumido. Hemos marcado una hoja de ruta desde el punto de vista presupuestario, de gestión y jurídico para coger el Xerez CD desde sus más básicas problemáticas. Tomamos la dirección jurídica del concurso presentando una modificación del convenio de acreedores aprobado por sentencia del 2012. Hemos conseguido que se apruebe la modificación de la propuesta del convenio de acreedores consistente en un importante balón de oxígeno para el Xerez CD que ve reducido el montante de su crédito ordinario a pagar en diez años con cinco años de carencia y un calendario de pagos a partir del sexto. Esto da la posibilidad de presupuestar con seriedad, rigor y responsabilidad. El Xerez CD es una Sociedad Anónima Deportiva y está obligada a una serie de requisitos jurídicos y formales y ese es nuestro cometido”.
También estuvo presente Óscar Garvín, presidente de Gestar Sport, que hablaba de las “negociaciones que nos llevaban a altas horas de la madrugada por la premura de tiempo que nos exigía el juzgado. Esto significa la apertura del candado más grande que tenía el Xerez CD”.
Y es que la entidad ha tenido que negociar esta reducción de la deuda con acreedores tales como ex jugadores, ex empleados y clubes como el Barcelona, Sevilla, Valladolid, Valencia, Mallorca o Independiente de Avellaneda.
Decía Juan Luis Gil que “han sido cuatro meses muy duros. Sabíamos que iba a ser muy difícil llegar a un acuerdo con el 51% de los acreedores. Aquí está la viabilidad del Xerez CD. La palabra inviabilidad no existía”. Además recordaba la figura de Joaquín Bilbao “que, una semana antes de fallecer, nos dijo que perdonaba todo lo que se debía”.
José Cepero continuaba comentando que detrás de esto hay “muchísimo trabajo, esfuerzo y desempolvando mucha documentación. Hemos presentado un plan de pagos y un plan de viabilidad como así exige la ley. Ha tenido su aceptación. Se plantea un pago en diez años, los cinco primeros de carencia. Ese plan de viabilidad está demostrado, si entra la pelota, respaldado por un respaldo financiero y con una planificación presupuestaria milimétrica”.
Una deuda que eran “trece millones de euros”, se redujo en un 50% y “ahora la dejamos en dos millones. A pagar en diez años. Tenemos otro club”, seguía el letrado.
Ahora, el siguiente paso será el tema del Registro Mercantil: “Un millón de problemas. El símil del Xerez CD era el de un enfermo en coma y ahora lo tenemos en planta. Nos queda mucho trabajo, mucho esfuerzo. Nos queda una hoja de ruta larguísima y estamos en los primeros pasos”.
Y la convocatoria de la Junta General de Accionistas porque “el Xerez CD es una SAD y hay que cumplir la ley. El siguiente paso es convocar una Junta General de Accionistas. Ese paso se va a dar”. Aunque, antes, se convocará una asamblea popular para explicar a los abonados la situación y animarles a arrimar el hombro, ya que harán falta personas para el Consejo de Administración.
Por último, con los acreedores privilegiados “estamos en ello. En la situación entra el bloqueo institucional o público, del que lo estamos sacando. Todo esto acredita una viabilidad y demostrar que se puede seguir para adelante. El que un juzgado, desestimando las alegaciones, haya aprobado una memoria económica y un plan de pagos y viabilidad demuestra que es posible. Con Hacienda, por supuesto, tendremos que llegar a un acuerdo. Debe ser posible”.
