El empresario Alberto Luceño ha negado haber incurrido en un delito de alzamiento de bienes en las comisiones millonarias obtenidas por la compra de mascarillas para el Ayuntamiento de Madrid, y se ha comprometido a ingresar en la cuenta embargada el dinero de sus actuales negocios.
Así consta en un escrito presentado ante el juez Adolfo Carretero, al que ha tenido acceso Europa Press, y en el que el socio de Luis Medina señala que "las próximas retribuciones que reciba por los actuales negocios llevados a cabo por Takamaka serán ingresados en la cuenta de Takamaka embargada".
Ello después del bloqueo de las cuentas efectuado el pasado 8 de abril que corresponde a tres cuentas corrientes. Una de ellas pertenece a la empresa Takamaka Invest SL, de la que el comisionista es apoderado. Ahora, Luceño defiende "absoluta ausencia de hecho delictivo alguno en el orden patrimonial".
En relación a los vehículos de lujo adquiridos, el empresario asegura que el dinero procedente de sus ventas, está en los saldos "embargados" de Takamaka.
El juez Adolfo Carretero ha dictado un auto en el que insta a las partes personadas en la causa de las mascarillas que propongan nuevas medidas económicas a imponer a Alberto Luceño tras no poder embargar los 5,5 millones que se embolsó de las comisiones y haber vendido hace 15 días los coches de lujo que adquirió con el monto millonario obtenido.
Fue el Juzgado de Instrucción número 47 de Madrid quien ordenó el embargo de un piso propiedad de Alberto Luceño ubicado en la localidad de Pozuelo de Alarcón. Esta propiedad junto al dinero que le han bloqueado en sus cuentas no es suficiente para hacer frente a la responsabilidad civil que pide la Fiscalía y que supera los 5 millones de euros.
En una misiva enviada desde ese juzgado al Registro de la Propiedad de Pozuelo, a la que ha tenido acceso Europa Press, se explica que el embargo comporta la prohibición absoluta de vender, gravar, obligar o enajenar el inmueble que está a nombre de la mercantil Takamaka Invest SL, cuyo titular es Luceño.