Uno de los decanos del cante flamenco de San Fernando, dueño de un arte innato y garante de los cantes arcaicos de La Isla, Sebastián Rodríguez Farina de la Isla, recibirá un merecido y muy esperado homenaje en su ciudad el próximo miércoles día 25 de mayo.
Este acto de reconocimiento parte de una idea muy deseada por todos y todas los aficionados al cante, admiradores de esta artista que acaba de cumplir 90 años, y que finalmente se ha puesto en marcha gracias a la colaboración del Ayuntamiento de San Fernando y la Asociación Cultural Flamenca La Fragua.
De esta forma, el próximo día 25 de mayo en el Centro de Exposiciones y Congresos Cortes de la Real Isla de León a partir de las 19.00 horas, la comunicadora Loli Guerra conducirá este acto de homenaje en el que el profesor Gabriel Urbina, enamorado del cante de Farina y que compartió con él el mismo patio de vecinos en su infancia, glosará la figura de este cantaor único.
El reconocimiento también contará con la actuación de una docena de artistas de La Isla, cantaores y cantaoras, así como guitarristas, y en él intervendrán también miembros de La Fragua para poner en valor la relevancia de este artista que es toda una seña viva del flamenco isleño.
La entrada al homenaje a Farina de la Isla será libre hasta completar el aforo.
La alcaldesa de San Fernando, Patricia Cavada, ha expresado su satisfacción “por poder trabajar de la mano de La Fragua para dar este merecido homenaje a Sebastián, a nuestro Farina, que como bien dicen los expertos guarda en su garganta miles de cantes antiguos, que ha convivido y actuado junto a los más grandes cantaores en los tablaos de nuestra ciudad y de la provincia, y que es junto a figuras como Camarón y Chato de la Isla el símbolo de una época de oro en el flamenco de San Fernando”.
Cavada ha invitado a toda la ciudadanía isleña, no solo a las personas aficionadas al flamenco, a participar de esta cita de reconocimiento a un pilar cultural de la esencia más tradicional de la ciudad representada en este artista, que tomó el sobrenombre de Farina de la Isla porque su cante emulaba a ese gran cantaor de Salamanca al que llegó a conocer en una de sus actuaciones.
Farina de la Isla vivió una de las mejores etapas del flamenco isleño, en la que convivió con figuras de los años 50 y 60 de la talla de los míticos Beni de Cádiz, el Cojo Farina, el Chato de La Isla, Manuel Monje o el propio Camarón.
A diferencia de ellos, Farina nunca dejó La Isla ni fue a probar suerte a los tablaos del Madrid y del resto de España, lo que sin duda mermó sus posibilidades como artista. Centró su carrera en su ciudad, donde llegó a actuar en la mítica Venta Vargas y en el propio Real Teatro de las Cortes con apenas 15 años, y en las actuaciones que hizo por el resto de la provincia de Cádiz, siempre cerca de su madre a la que nunca quiso dejar atrás.
Pese a todo, este cantaor siempre paseó y sigue paseando su arte en estado puro, sus cantes señeros de La Isla y sus letrillas de cosecha propia, que se recogieron en un CD que todavía hoy vende este que es “el más antiguo de los cantaores de San Fernando”, como el mismo se autodefine.