Así, la próxima semana entrará por los Pirineos una borrasca de aire frío, que causará “mucha inestabilidad” en la Península, pero sobre todo en las zonas del Mediterráneo y Baleares. Este nuevo frente traerá precipitaciones en el norte y tercio oriental de España (Cataluña, Comunidad Valenciana, Murcia y Este de Castilla La Mancha, especialmente) que irán acompañadas de viento, lo que hará que la sensación térmica sea “de mucho frío”.
Rivera aseguró que las temperaturas descenderán cuatro o cinco grados, tanto máximas como mínimas. A mediados de la semana, el viento se calmará, lo que provocará heladas generalizadas, con valores mínimos en el interior de la Península de entre cinco y siete grados bajo cero, sobre todo en la meseta norte, y de tres o cuatro grados bajo cero, en la meseta sur.
“La situación ira remitiendo hacia el viernes, por lo que la semana será una semana inestable, especialmente en zonas mediterráneas y zonas montañosas del norte, con precipitaciones que pueden ser de nieve en torno a los 700-900 metros, lo que indica que baja bastante la cota de nieve. En principio, la semana que viene se presenta como desapacible y fría”, destacó Rivera.
Hoy se prevén lluvias débiles y dispersas en toda la Península, aunque en el suroeste de Andalucía, especialmente en el Estrecho y Mar de Alborán, se espera que sean fuertes y persistentes, pudiendo derivar en tormentas, tendiendo a disminuir, por el oeste, al final del día.
Estas precipitaciones harán que las provincias de Huelva, Sevilla, Cádiz, Málaga y Ceuta, así como, el litoral andaluz, se encuentren mañana en alerta amarilla por riesgo de lluvia.
En la zona centro, Cataluña y Baleares son las zonas en las que es menos probable que se registren precipitaciones, y si ocurre será de forma muy débil.
El cielo estará nuboso o muy nuboso en términos generales y la cota de nieve se situará en 1600-1800 metros bajando a 1200-1400 metros en el norte y en el nordeste peninsular. En Canarias, en las islas más orientales y en el norte del resto el cielo estará nuboso o muy nuboso con probabilidad de lluvias débiles e intervalos nubosos en el resto, según se desprende de las predicciones de la Aemet.