El Juzgado de Violencia sobre la Mujer número tres de Sevilla ha ordenado este viernes a petición de la Fiscalía, el ingreso en prisión provisional, comunicada y sin fianza de Alfredo G.C., el varón de 50 años de edad y nacionalidad boliviana arrestado por matar supuestamente a su expareja, de 51 años y la misma nacionalidad, y ocultar después su cadáver entre unos juncos en el tramo del río Guadalquivir correspondiente al barrio sevillano de San Jerónimo.
Según ha informado la Oficina de Comunicación del Tribunal Superior de Justicia de Andalucía, en espera de lo que se determine durante la instrucción de la causa, se le atribuyen presuntos delitos de homicidio/asesinato, estafa y lesiones en el ámbito familiar. El detenido se ha acogido a su derecho constitucional a no declarar, toda vez que la causa sigue bajo secreto de sumario.
La desaparición
Ello, después de que quedasen en libertad con cargos las dos mujeres detenidas por encubrir presuntamente la muerte violenta de Virginia F.T., quien desapareció el pasado 25 de abril, siendo denunciado tal extremo ya el pasado 4 de mayo.
Tras unos dos meses de investigación a cuenta de esta desaparición, el Grupo de Homicidios de la Policía Nacional ha detenido al citado varón, expareja sentimental de la fallecida.
La confesión ante la policía
El arrestado habría declarado a los agentes, ante las pruebas incriminatorias en su contra, que tras el crimen se deshizo del cadáver ocultándolo entre unos juncos del brazo del río Guadalquivir correspondiente a San Jerónimo, donde los investigadores han recuperado el cuerpo.
El detenido fue condenado en 2020 por un delito de lesiones en el ámbito de la violencia de género sobre la víctima a 40 días de trabajo en beneficio de la comunidad y 16 meses de alejamiento de la fallecida, así como a la prohibición de comunicarse con ella, según el Tribunal Superior de Justicia de Andalucía (TSJA), según el cual no consta ningún quebrantamiento de dichas medidas impuestas por el Juzgado de Violencia sobre la Mujer número tres de Sevilla, tras un juicio rápido saldado por conformidad entre las partes, y que la pena fue cumplida.