Agentes de la Policía Nacional han detenido en Valencia a dos hermanas, de 33 y 36 años, una de ellas como presunta autora de un delito de hurto y la otra como sospechosa de receptación, tras sustraer joyas por valor de unos 100.000 euros a un matrimonio de avanzada edad.
Una de las arrestadas se encargaba de cuidar a la octogenaria con alzhéimer y fue al ausentarse el marido del domicilio cuando aprovechó para robar los efectos que tenían guardados en el doble fondo de un armario, para posteriormente, en compañía de su hermana, venderlos en diferentes casas de compraventa de metales preciosos, según han informado fuentes de la Policía Nacional.
Las investigaciones se iniciaron a finales del mes de julio, cuando el grupo de Robos de la Brigada Provincial de Policía Judicial de Valencia comprobó que las zonas de acceso al interior del domicilio no se encontraban forzadas.
Por ello, los policías hicieron gestiones con las casas de compraventa de metales preciosos de la ciudad y averiguaron que dos hermanas habían estado vendiendo numerosas joyas de oro, y que una de ellas era la encargada de los cuidados de la anciana.
La cuidadora, tras tener conocimiento de que los agentes investigaban los hechos, dejó de nuevo en el armario algunas de las joyas que previamente había sustraído, para hacer creer al marido que no se las habían hurtado.
No obstante, las indagaciones de los agentes les condujeron hasta las casas de compraventa de metales preciosos de Valencia y averiguaron que la sospechosa, junto a su hermana, habría vendido las joyas hurtadas, entre ellas una gargantilla de oro y diamantes valorada en más de 35.000 euros.
Finalmente, los agentes detuvieron a las hermanas, una de ellas como presunta autora de un delito de hurto y la otra como responsable de un delito de receptación. Las arrestadas, sin antecedentes policiales, han pasado a disposición judicial.
Además, los investigadores han conseguido recuperar joyas valoradas en más de 3.000 euros que fueron entregadas a sus legítimos propietarios.