Todas las bajas se registraron ayer, el día de la operación en Helmand en que las tropas internacionales han registrado más víctimas.
Según sendos comunicados de la Fuerza Internacional de Asistencia a la Seguridad (ISAF), tres de los soldados fallecieron por la explosión de bombas camineras y otros tres por disparos de arma corta en distintos enfrentamientos en Helmand.
La fuente no concretó la nacionalidad de las víctimas ni otros detalles.
La ISAF y el Ejército afgano comenzaron el pasado sábado la operación Moshtarak (juntos, en dari) contra baluartes de a insurgencia talibán en el centro de la provincia helmandí.
Hasta ayer, la ISAF había dado cuenta de cinco bajas entre sus filas.
Además, unos 40 insurgentes, 15 civiles y un soldado afgano han muerto durante la operación, según datos oficiales del Gobierno afgano.
La fuerza ISAF de la OTAN admitió ayer estar encontrando “bolsas de resistencia” talibán en el núcleo urbano de Marjah, epicentro de la ofensiva militar lanzada el pasado día 13 en la provincia sureña afgana de Helmand.
En su parte diario sobre la operación Moshtarak (juntos, en dari), que relata el transcurso de los combates a día de ayer, la ISAF dijo estar hallando más resistencia en Marjah que en Nad Alí, distrito cercano también enmarcado en la ofensiva.
“Consideramos la situación general en el centro de Helmand positiva”, resumió la OTAN. La organización militar explicó que en Nad Alí y en el desierto de Bolán las tropas británicas y afganas están llevando a cabo operaciones de limpieza de insurgentes.
Pero en Marjah, que tiene unos 80.000 habitantes, militares estadounidenses y afganos está hallando “decididas bolsas de resistencia” talibán en el flanco norte y este, según la descripción de la OTAN.
Las bombas camineras que los integristas colocan en las carreteras, constató la ISAF, siguen siendo “la mayor amenaza” para la fuerza aliada.