El cambio climático es un problema que está preocupando cada vez a una mayor parte de la población. Este pasado mes de octubre hemos sufrido temperaturas por encima de lo normal, con 5 o 10 grados por encima de lo habitual tanto en las máximas como en las mínimas llegándose a records sobre la serie histórica para estas fechas. Y en este sentido cada vez son más las asociaciones o movimientos ciudadanos que realizan diferentes acciones para visibilizar este problema que, en definitiva, afecta a todo el mundo.
En Jerez existe la plataforma ‘Jerez por el Clima’ surgida en el año 2019 por diferentes activistas, personas procedentes de distintas organizaciones o de colegios preocupados por el cambio climático. Carlos Fernández, portavoz de esta plataforma entiende que “hay que reivindicar la situación y más ahora con la convocatoria de la Conferencia del Clima”. En el caso de esta plataforma, las acciones que realizan se hacen “enfocadas a las actuaciones que se pueden realizar en Jerez”.
Con la pandemia del Covid la actividad de ‘Jerez por el Clima’ estuvo “algo parada, aunque ahora estamos poniéndonos en marcha otra vez”, explica Fernández. “Como somos de Jerez vamos a la política local y a las propuestas que los partidos tienen que poner en funcionamiento para mitigar las temperaturas en esta emergencia climática. Que se tomen medidas como buscar una movilidad sostenible, un buen arbolado o mejorar el transporte público para intentar mitigar las consecuencias del cambio climático”.
“Exigimos que la política ponga en el centro lo que es el cambio climático”, comentan. “En movilidad pedimos que se facilite a la ciudadanía el uso del transporte público con unos horarios eficientes. No puede ser, por otro lado, que 8 años después de hacer un carril bici no se hayan dado más pasos para que se conecten esos carriles o para que en los barrios la gente tenga lugar para dejar las bicicletas. También queremos hablar con colegios para fomentar que los niños no vayan en coche. Y de igual manera no vemos políticas para el peatón con la colocación de más arbolado o pérgolas. Cuando llega el calor las personas más vulnerables no tienen recursos para poner un aire acondicionado. La situación es dramática y queremos que en nuestra ciudad sea posible vivir”. Asimismo, Carlos Fernández apunta a que “queremos que esto sea un tema participativo y que las políticas sean consensuadas con movimientos ecologistas y con los ciudadanos. Hay que consensuar qué modelo de ciudad queremos”.
Aunque esto es un problema global, desde la plataforma entienden que “desde lo pequeño hacemos lo grande. Desde la ciudad. Somos nosotros los que pasamos el calor. Hay que promover el autoconsumo en las instalaciones, por ejemplo, para poder tener más ahorro y menos emisiones. Hay muchas cosas que podemos hacer. Pero la participación es fundamental y montar una mesa de diálogo”.
Y en cuanto a concienciación en la sociedad, Carlos Ferández cree que “hay de todo. Hay preocupación, pero a veces la ciudadanía necesita ver que se hacen cosas. Hemos pasado por sicuationes como una pandemia, una guerra, la inflación que hace que la preocupación pase a otro plano, pero está”. Además, a los negacionistas les dice que “esto lo estén viviendo y lo están sufriendo ellos mismos. Lo único que hacen es negar la realidad y se están equivocando”.
Zonas de bajas emisiones a partir del 1 de enero de 2023
El próximo 1 de enero de 2023 entrarán en vigor las Zonas de Bajas Emisiones en España. La Ley de cambio climático y transición energética aprobada el pasado 2021 obligará a que las ciudades con más de 50.000 habitantes tengan áreas restringidas para la circulación de vehículos contaminantes con el objetivo de recudir esa contaminación. Una medida que ya es habitual desde hace varios años en grandes capitales como Madrid o Barcelona con la instalación de cámaras que vigilan la entrada de vehículos en las diferentes zonas delimitadas. En este sentido, Carlos Fernández comenta que no es suficiente “con instalar cámaras y prohibir ir a ciertos sitios. Hay que trabajar en el transporte público, porque no es operativo. Eso es lo que de verdad ayuda para que no tengamos que coger el coche. Hay que facilitar que podamos ir en bicicleta con más aparcamientos”