Así lo manifestó el abogado del hincha del Olympique de Marsella, Erlantz Ibarrondo, a la salida del juzgado, después de cerca de cinco horas de testimonios en las que la jueza pudo escuchar las explicaciones de tres agentes de seguridad y del propio Santos Mirasierra, así como de varios amigos del galo y miembros de seguridad franceses.
Santos Mirasierra se enfrenta a ocho años de cárcel, que solicita el ministerio fiscal, cuatro por el delito de desórdenes públicos, y otros cuatro por el delito de atentado en concurso con un delito de lesiones y privación del derecho de sufragio durante la pena, además de dos meses de multa con cuota diaria de 20 euros por una falta de lesiones.
El abogado de Mirasierra declaró que “soy optimista de cómo ha salido el juicio. Hemos conseguido acreditar la falta de responsabilidad”.