La Agencia Europea para la Seguridad en la Navegación Aérea (Eurocontrol) señaló ayer que unos 17.000 vuelos han sido cancelados de los alrededor de 29.500 que tenían previsto despegar o aterrizar en aeropuertos europeos.
Según Eurocontrol, Irlanda, Dinamarca, Finlandia, Bélgica, Holanda y la República Checa mantienen ahora mismo sus espacios aéreos absolutamente cerrados y la práctica totalidad de los cielos del Reino Unido permanecen bloqueados al tráfico, mientras que en Suecia, Noruega, Alemania, Francia y Polonia están clausurados de forma parcial.
Las restricciones de vuelos e, incluso, el cierre de espacios aéreos se han decidido por el peligro que las cenizas volcánicas pueden suponer para los motores de los aviones, ya que la entrada de este tipo de elemento puede causar el paro de las turbinas, con el riesgo que conlleva para el vuelo.
En el Reino Unido, las restricciones seguirán hasta al menos las 06.00 GMT de hoy. También Francia prolongó el cierre de veinte aeropuertos hasta las 06.00 GMT de hoy y mantiene provisionalmente la hora de apertura de las terminales parisienses para las 18.00 GMT de ayer.
Asimismo, Suiza –adonde se espera que la nube de cenizas llegue esta medianoche– clausuró su espacio aéreo, que no se abrirá, al menos, hasta las 09.00 hora local del sábado (08.00 GMT).
Finlandia ha decidido ampliar el cierre total de su espacio aéreo hasta el próximo domingo a las 15.00 hora local (12.00 GMT), pues se espera una segunda oleada de cenizas sobre Escandinavia durante el fin de semana.
En Europa Central y del Este, donde se aguarda la llegada en breve de la nube de cenizas, Austria y Hungría han clausurado su espacio aéreo, mientras que Eslovaquia ha hecho lo propio, pero ampliando esta medida un día más, hasta el domingo.
Rumanía cerrará desde la pasada madrugada parcialmente su espacio aéreo, en concreto en el norte y el noroeste, mientras que la República Checa ya lo ha hecho, lo que ha impedido regresar a su país al presidente de Portugal, Anibal Cavaco Silva, de visita en Praga.
En España se han tenido que suspender más de 1.120 vuelos y las compañías aéreas españolas Iberia, Air Europa, Spanair y Vueling han anunciado que van a ser flexibles en el cambio de los billetes de sus pasajeros para los destinos que se han visto cerrados por la nube de cenizas del volcán.
El coste económico de este caos en que se encuentra sumido el transporte aéreo europeo ha sido valorado por la Asociación Internacional de Transporte Aéreo (IATA) en aproximadamente 148 millones de euros diarios (unos 200 millones de dólares).
Pero este coste puede ser mayor, dado que las principales aerolíneas que cotizan en bolsa han sufrido fuertes caídas al cierre de la semana.
Iberia, que lideró durante casi toda la sesión las pérdidas del Ibex-35, cerró la sesión con una caída del 3,38%.