Mohamed Ajmal Amir alias Kasab fue hallado culpable de 83 de los 86 cargos que se le imputaron, entre ellos los de guerra contra la India y asesinato, mientras que los dos indios acusados fueron absueltos por falta de pruebas.
El tribunal consideró probado el argumento de la Fiscalía de que el comando que atacó Bombay actuó bajo las órdenes del comandante del grupo separatista cachemir con base en Paquistán Lashkar-e-Toiba (LeT), Zakiur Rehman Lakhvi. El asalto a la ciudad india no fue un simple acto de asesinato, sino “parte de una conspiración mayor para librar una guerra contra la nación” india, dijo el juez.
“El veredicto en sí mismo es un mensaje a Paquistán de que no debería exportar terrorismo a la India y de que, si lo hacen, y si los terroristas son detenidos, podremos llevarlos ante la Justicia y darles un castigo ejemplar”, dijo el ministro indio del Interior, P. Chidambaram, en un mensaje a la prensa.
Chidambaram se mostró satisfecho por la rápida resolución del juicio, que comenzó en abril de 2009 –este tipo de casos suelen llevar más de una década en la India–, y valoró como una muestra de la “independencia, falta de temor e integridad” de la Justicia india que dos de los acusados fueran absueltos.