El ministro de Presidencia, Relaciones con las Cortes y Memoria Democrática, Félix Bolaños, ha acusado a Unidas Podemos (UP) de haberse quedado "atrapado en tecnicismos" en la modificación de la Ley de Libertad Sexual y ha garantizado el consentimiento.
"Hay un artículo en la Ley que habla del consentimiento, y no se toca. Con lo cual, el consentimiento está donde estaba antes de la reforma", ha dicho en una entrevista en La 2 y Ràdio 4 de este viernes recogida por Europa Press.
La modificación legislativa obtuvo 233 votos a favor de PSOE, PP, PNV, PDeCAT, Coalición Canaria, Foro Asturias, Teruel Existe, Partido Regionalista de Cantabria y Navarra Suma; 59 en contra de Podemos, ERC, Bildu, Más País, Compromís, CUP y los diputados independientes Meri Pita y Pablo Cambronero, y 4 abstenciones de los diputados de Junts; Vox, por su parte, ha decidido no votar.
Bolaños ha achacado los cambios interpuestos en la norma --que ha dicho que ve muy positiva-- a que "era interpretable" y ha añadido que la aclaran.
"Los tribunales al aplicarla han tenido distintas posiciones. Más o menos dos tercios han considerado que no había que rebajar penas", ha señalado.
Así, ha replicado a la secretaria de Estado de Igualdad, Ángela Rodríguez 'Pam', que "las mujeres están clarísimamente mucho más protegidas" con el nuevo redactado.
EL ACUERDO DE CLARIDAD, "UNILATERAL Y ELECTORALISTA"
El ministro de Presidencia ha tachado de "unilateral y electoralista" la propuesta de acuerdo de claridad planteada por el presidente de la Generalitat, Pere Aragonès.
Preguntado por si mantendrá algún encuentro fuera del foco informativo con él, ha respondido que "esta vez no lo va a haber" y ha abogado por que las negociaciones se hagan en un plano discreto y, una vez alcanzado el acuerdo, se haga público.
Ha valorado positivamente los cambios en Cataluña respecto a 2017, cuando ha dicho que estaba al borde del precipicio y de donde cree que las empresas huían, y ha ensalzado a "la gente que no se le ha parado el reloj en 2017 y que ha sido valiente de dialogar".
En el lado opuesto ha situado al expresidente de la Generalitat Carles Puigdemont, quien ha dicho que "se ve más alejado de Cataluña en lo político y en lo personal" y ha insistido en que debería rendir cuentas con la justicia española, en sus palabras.
"Hay personas en Cataluña que desean que haya un referéndum o que Cataluña sea un territorio independiente de España, de la Unión Europea y probablemente del mundo. No son independientes, son aislacionistas", ha remarcado.