Uno de estos vendedores ambulantes, José Llaves, aseguró a este diario que “sólo un 20 % de los puestos se quedaron para cumplir el horario establecido, es decir, unos 40 ó 50 de los 300 puestos habituales”. “Sólo permanecieron los de Algeciras y algunos de La Línea, pero los de Lebrija o Jerez, se fueron en el horario habitual, en torno a las 14.30 horas”, añadió.
Además, el comerciante manifestó que “la prolongación del horario tampoco se ha notado en las ventas, dado que las calles y los puestos estaban prácticamente vacíos durante la tarde”.
Al respecto, Llaves considera que para que hubiese compensado, “el mercadillo debería haberse instalado de 17.00 a 21.00 horas, porque las altas temperaturas hacen que la gente no valla al mercadillo cuando el calor aprieta”. De hecho, concluyó, “esta posibilidad también fue barajada por parte de nuestros clientes”.