“Incertidumbre y desconcierto”. Ese es el sentimiento generalizado en los profesionales del área sanitaria de Jerez-Costa Noroeste por los refuerzos de las vacaciones. Hasta este miércoles no conocerán el plan de contrataciones de verano y temen que pueda llegar a haber saturación.
Álvaro Puerto, delegado sindical de CCOO en el Hospital de Jerez explicaba que ese “desconcierto” llega porque los profesionales “no saben todavía” las renovaciones que se van a llevar a cabo “dentro de lo que es el plan de vacaciones, que todavía no se nos ha presentado”. Desconocen “el número de personas que se va a contratar para la sustitución del personal que está trabajando en este área sanitaria”.
Igualmente, pone el foco en los “mal llamados contratos Covid. Son profesionales que llevan varios años trabajando de forma continuada y que no entrarían en ese plan de vacaciones para poder tener sustitución e irse de vacaciones dentro del periodo estival”.
El temor a que pueda haber una reducción de la plantilla en verano es “un temor que tenemos ya un poco visto”. Explica que “llevamos un par de meses en el que las bajas no se han estado cubriendo tanto en el Hospital como en los centros de salud”. Puerto, añadía que “ha habido profesionales que se han tenido que cambiar de centro de salud para cubrir una incidencia por falta de personal”. Se llega a este punto “después de un periodo en el que no ha habido renovaciones y, por tanto, falta de personal”.
Los contratos de verano comenzarán el 1 de julio. Desde CCOO tienen “conocimiento de que ha habido algunos llamamientos para contratos de 10-15 días para suplir los contratos que finalizan el 30 de junio”. Y ahora, este plan de vacaciones llegará a escasos días de que finalice el mes: “¿Dará tiempo a contratar a todo el personal? Entendemos que sí, pero se hará, como siempre, tarde y mal. El profesional que se vaya a incorporar el 1 de julio es probable que desconozca los turnos que va a tener y el desconcierto que eso genera para todos los profesionales”.
En cuanto a la situación del SAS, destacaba que “se ha ido reduciendo el personal y partimos de una base de falta de profesionales. El personal está muy cansado y los propios usuarios son los que sufren esta falta de personal en las listas de espera. Y, al final, ese cansancio de los usuarios ha llevado a un aumento de agresiones a profesionales”.
