Según testigos presenciales, la víctima del robo notó la falta del dinero cuando pretendía pagar por la compra que había realizado en el referido comercio.
Por tanto, hasta el momento se desconoce si la sustracción de la referida cantidad se produjo nada más sacarlo del banco o bien durante su estancia en el establecimiento comercial.
En cualquier caso, el propietario del mismo aseguró que las cámaras de seguridad que mantiene en su negocia podrían llegar a esclarecer si el robo se había realizado en el citado comercio.
Falta de seguridad
Como consecuencia de la impresión sufrida al darse cuenta de la falta del dinero, la mujer estaba afectada de una crisis de ansiedad y fue atendida en un primer momento por los viandantes, mientras esperaba la llegada de la Policía Nacional para interponer la correspondiente denuncia.
En cualquier caso, los transeúntes que en ese momento se hallaban en el lugar de los hechos aseguraron en esos momentos que “existe una gran falta de seguridad en la zona baja de la ciudad”.
Para avalar sus afirmaciones destacaron que hace dos semanas se produjo otro robo, con escala, en este caso en una asesoría situada en la calle Emilio Castelar.