El grupo de asistencia de paracaidistas submarinos de la Royal Navy que está actuando en GBZ durante estos días está especializado en el rescate de tripulantes de submarinos que han sufrido alguna incidencia.
Se trata de militares médicos y rescatadores que están preparados para partir hacia cualquier lugar en que se origine un problema en un plazo máximo de 6 horas.
Al recibir la información de que un submarino tiene alguna incidencia, el grupo acude en un Hércules C-130 para llegado al punto del suceso lanzarse al mar y acto seguido establecer un centro médico flotante.
El oficial al mando del grupo el Comandante, Teniente Gary Tregunna, dice que dependiendo de las condiciones existentes dentro del submarino siniestrado el primer paso es avisar a su tripulación para decirles que llegará una patrulla especializada en rescate. Si se requiriese de acción inmediata, ante las circunstancias del siniestro, se les aconseja que salgan por la escotilla existente en la vela del navío provistos del correspondiente equipo de emergencia. Llegados a la superficie son rescatados y se les ofrece un tratamiento de forma inmediata.
En el ejercicio que se está desarrollando en Gibraltar esta semana el centro médico flotante ha sido instalado en las inmediaciones de Western Beach (zona de poniente de la bahía) donde numerosos “supervivientes” con numerosos problemas médicos fueron rescatados del mar. El ejercicio tenía como objetivo evaluar la operatividad de la plantilla médica, las comunicaciones submarinas por radio y el trabajo del grupo, consistente en rescatar a los supervivientes y llevarlos a zona médica segura.
Hoy jueves se han efectuado un total de 5 lanzamientos en la bahía.
