El tiempo en: Mijas
Miércoles 18/12/2024
 

Cádiz

El África negra acusa a la conferencia del sida de desoír sus necesidades

La comunidad negra y africana ha acusado a la Conferencia Internacional SIDA 2010 en Viena de no ocuparse lo suficiente de sus necesidades y de reflejar la descoordinación reinante en muchos países europeos sobre el VIH/sida.

Andaluc�a Informaci�n
Publicidad Ai
Publicidad AiPublicidad AiPublicidad AiPublicidad AiPublicidad AiPublicidad AiPublicidad AiPublicidad Ai
Publicidad Ai
Publicidad AiPublicidad AiPublicidad Ai Publicidad AiPublicidad Ai
La comunidad negra y africana ha acusado a la Conferencia Internacional SIDA 2010 en Viena de no ocuparse lo suficiente de sus necesidades y de reflejar la descoordinación reinante en muchos países europeos sobre el VIH/sida.

“La política y la respuesta programática en toda Europa a la epidemia que afecta a los negros y africanos ha marginado nuestras voces y nuestra capacidad de articular nuestras necesidades para tomar decisiones sobre la mesa”, denunció ayer la Red Global de la Diáspora de Africanos y Negros sobre VIH y Sida (Abdgn).

Abdgn afirma que la falta de coordinación ha causado que esta población sea desoída en el reparto de información y recursos, pese a que muchas de esas comunidades proceden de países con un alto número de portadores del Virus de Inmunodeficiencia Humana (VIH) en África y el Caribe.

Recordó que un 46% de todos los heterosexuales infectados de VIH en Europa occidental en 2005 eran emigrantes de países con un alto nivel de infectados.

Por otro lado, según advertencias de expertos de Naciones Unidas, las cárceles son auténticas “incubadoras” y “diseminadoras” del sida en numerosos países debido a prácticas de riesgo.

El consumo de drogas con jeringuillas usadas, los tatuajes y “piercings” realizados sin las mínimas condiciones higiénicas, así como las relaciones sexuales sin protección son algunas de las causas de que la prevalencia del sida y la tuberculosis en las prisiones sea mucho mayor al resto de la sociedad.

En todo el mundo hay unos 30 millones de encarcelados, que tienen una tasa de prevalencia del sida superior en entre 1,5 y 50 puntos porcentuales al resto de la sociedad.

“Las prisiones suponen una tormenta perfecta para una larga lista de asuntos sanitarios”, explicó Andrew Bell, experto del departamento de VIH de la OMS.

TE RECOMENDAMOS

ÚNETE A NUESTRO BOLETÍN