El grupo municipal de Con Málaga, confluencia de Izquierda Unida, Podemos, Verdes Equo, Más País, Alianza Verde e Iniciativa del Pueblo Andaluz, ha mostrado sus respaldo a las reivindicaciones de los profesionales del taxi para "defender al sector frente a la competencia desleal y la falta de regulación de los VTC, la necesidad de crear nuevas licencias en la capital y de redoblar medidas efectivas para acabar con los taxis pirata".
La concejala portavoz de Con Málaga, Toni Morillas, ha abogado por "proteger al sector del taxi, que está siendo víctima de una absoluta desregulación e indefensión". "De forma cada vez más clara sufre impunemente la competencia desleal y las presiones por parte de las multinacionales del transporte de VTC", ha apuntado.
A la vez ha apoyado las movilizaciones y reivindicaciones del colectivo de asalariados del taxi de Málaga y del sindicato CGT "que demandan un aumento del número de licencias para poder atender de forma adecuada la demanda existente en la capital, ofrecer un servicio público de calidad y frenar la expansión de los vehículos de VCT que tantos efectos negativos está provocando este verano".
Morillas ha explicado que "la ciudad cuenta en la actualidad con 1.432 licencias de taxis públicos, una cantidad que se revela insuficiente ante el crecimiento de la demanda. Por ello el colectivo de asalariados del taxi reclama, al menos, 140 nuevas licencias".
Pero ha lamentado que "el equipo de gobierno del PP tan sólo prevé 14 y se trata de un número claramente insuficiente, que no resolverá el problema y que contribuirá a que se siga entregando el servicio público a las multinacionales del sector del transporte y en contra del interés general".
Morillas también ha apuntado a otro problema para la viabilidad del sector del taxi en Málaga como es "la presencia de vehículos pirata que ejercen de taxi de forma ilegal, sobre todo en el aeropuerto".
Al respecto, el portavoz adjunto de Con Málaga, Nicolás Sguiglia, ha indicado que "en los últimos días se está intensificando las denuncias de los profesionales del taxi, principalmente a través del colectivo Élite Taxi, sin que se actúe con medidas eficaces".
"Esta situación no es sólo una ilegalidad y un ataque al sector público del taxi, también supone un problema de seguridad para las personas que los utilizan y atacan a la calidad de la industria turística de la ciudad", ha manifestado.
Por ello considera que "urge redoblar y dirigir adecuadamente esfuerzos por parte del equipo de gobierno en coordinación con el resto de las instancias públicas con competencias para actuar".