Holder dijo que las autoridades estadounidenses creen que diez de los 14 acusados, todos residentes de Minesota, California y Alabama, se encuentran fuera de EEUU.
Los cargos divulgados ayer “arrojan más luz sobre un peligroso conducto que ha canalizado financiación y combatientes a la organización terrorista Al-Shabaab desde ciudades en todo Estados Unidos”, manifestó Holder.
Agregó que, aunque las investigaciones continúan, los cargos y arrestos deben servir como una “advertencia inequívoca” a quienes sopesen unirse a grupos terroristas como Al-Shabaab porque a esas personas sólo les espera la cárcel o la muerte.
Estos cargos reflejan una tendencia que preocupa de igual manera a los líderes de las comunidades musulmanas en Estados Unidos.