El juicio contra el alumno de 14 años detenido por la agresión con arma blanca a tres profesores y dos alumnos en el centro donde estudia, el IES Elena García Armada, no se celebrará antes de que termine el año. Aunque las partes van a “procurar” que la fase de instrucción para la práctica de pruebas testificales y periciales se realice con diligencia, los tiempos judiciales impedirán que la vista en el Juzgado de Menores se desarrolle en el último trimestre de 2023. Así lo han apuntado a VIVA JEREZ fuentes de la investigación, a la espera de que las partes, Fiscalía y defensa, comiencen a solicitar las declaraciones de los testigos e informes para avanzar en la instrucción del caso.
Las mismas fuentes han confirmado que ante la Policía Nacional declararon por los hechos ocurridos el pasado jueves 28 de septiembre al menos 15 personas entre alumnos y docentes, -incluidos los heridos-, a los que también se citará en Fiscalía. A estos relatos, podrán incorporarse nuevos testimonios según lo soliciten las partes. De igual manera, el equipo de terapeutas del propio juzgado de menores, que ya emitió un primer informe técnico tras entrevistar al adolescente el pasado viernes en las dependencias judiciales, hará un seguimiento del menor que plasmará en el escrito definitivo que elevará a las partes. Una vez que se aporten todos los informes técnicos y se termine el expediente, se remitirán los escritos de calificaciones al Juzgado de Menores para la apertura de juicio oral.
Hasta la celebración del juicio, el estudiante permanecerá en el centro cerrado de internamiento de la provincia de Cádiz en el que ingresó el pasado viernes tras pasar a disposición de la Fiscalía del Menor, que decretó esta medida cautelar tras acordarlo con el juez de menores. Según ha podido saber este medio, el menor se encuentra “bien y adaptándose" en unas dependencias "donde se están atendiendo sus necesidades”. Se trata de un centro “más amable”, precisan las fuentes consultadas, porque el objetivo es “ayudar al menor”, reiteran. Mientras tanto, su familia está “impresionada” por los hechos y “pasando el trago”, aunque también se siente “arropada” por padres y profesores que han contactado con ella para mostrarles su apoyo.