Fue el pasado 23 de septiembre, a las 7,00 horas, cuando una mujer que iba camino de su trabajo paró junto a un portal con el fin de llamar a través del portero automático a una compañera para continuar el camino juntas, instante éste que aprovechó el ahora detenido para agarrarla por detrás, tras lo que la inmovilizó y le tapó la boca. La víctima logró darse la vuelta, comenzando a gritar, motivo por el cual su agresor le propinó dos fuertes bofetadas, una en la nariz y otra la boca, ha informado la Policía en una nota.
Ante esta actitud del agresor, la víctima cambió la estrategia y, tras decirle que la soltara y que accedería a lo que él quisiera, logró que el joven rebajara su grado de agresividad, momento en el que la denunciante aprovechó para salir corriendo dando voces y solicitando socorro. Consiguió que varios vecinos alertados por las voces salieran a los balcones, por lo que el agresor huyó de la zona.
Media hora más tarde de estos hechos la Policía tuvo conocimiento de que una persona cuya descripción física parecía coincidir con el presunto autor del delito contra la libertad sexual, intentó robar usando para ello la violencia, también en Motril. Sin embargo, el presunto ladrón no logró arrebatar a la víctima sus pertenencias por la resistencia y los gritos pidiendo auxilio de ésta, lo que ahuyentó al autor.
Ante tales hechos el Grupo de Policía Judicial inició las investigaciones barajando la posibilidad de que el autor de estas dos acciones pudiera ser la misma persona, por lo que los agentes se centraron en las descripciones físicas aportadas por testigos de los hechos.
Tras diversas gestiones de este grupo, se pudo dar con el paradero del presunto autor de los hechos y, tras verificar ciertos extremos, fue detenido y conducido a dependencias policiales. Tras la confección del atestado, el joven fue puesto a disposición del Juzgado de Instrucción de Motril en funciones de guardia.