Cerca de siete años llevaba una pareja de cigüeñas habitando el gran nido de la espadaña de la Catedral de La Merced de Huelva, un nido que fue retirado este martes y que ha generado gran revuelo en las redes sociales e incluso la petición del expediente administrativo por parte de Ecologistas en Acción.
Según han confirmado a Viva Huelva desde la Diputación de Huelva, ha sido la institución provincial la encargada de llevar a efecto el derribo del nido a petición del Obispado, que transmitió hace meses su inquietud por problemas de seguridad, pues ya se habrían caído algunos elementos del nido en la puerta de la Catedral, según han indicado desde la Diócesis de Huelva.
Para ello, Diputación, como propietaria del histórico edificio, contrató los servicios de una empresa, una vez que ya se habían tramitado todos los permisos, incluida la autorización excepcional dictada por la Delegación Territorial de Sostenibilidad, Medio Ambiente y Economía Azul.
Según reza en la autorización, a la que ha tenido acceso este medio, fue solicitada en el mes de abril por el Obispado y fue concedida un par de meses después, calificándose como autorización expresa excepcional al “no existir otra solución satisfactoria” por varios motivos: “Los nidos son de gran tamaño y pueden caer sobre la vía pública o dañar la cubierta del edificio con riesgo para las personas”, “el material que cae de los nidos supone igualmente un riesgo para la seguridad y salud de las personas”, “no se pone en peligro la situación de la especie afectada, ya que esta especie es relativamente abundante en nuestra provincia”.
Además, la autorización indicaba que el derribo del nido de cigüeña común situado sobre la espadaña de la Santa Iglesia Catedral, autorizado “para prevenir riesgos para la salud y la seguridad de las personas”, debería hacerse en unas condiciones concretas: entre 1 de septiembre y el 31 de diciembre de 2023, fuera de la época de reproducción y cría de esta especie, cuando el nido estuviera vacío y dese una hora después de la salida del sol hasta una hora antes de la puesta del sol.
Por su parte, Ecologistas en Acción ha indicado este miércoles a través de sus redes sociales que ha presentado una solicitud en la Delegación Territorial para acceder a “todo el expediente administrativo con los informes técnicos aportados que, en su caso, pudieran justificar y aconsejar su eliminación”.
Entiende la organización ecologista que “la seguridad no vemos parezca haber sido un obstáculo pues tanto el propio nido se hallaba en buen estado, tras su continuo seguimiento con prismáticos por personas conocedoras y cercanas a su ubicación, y la estructura de la espadaña, a falta de conocer informes técnicos que lo rebatan, se aprecia en buen estado y no parece sufrir ningún deterioro que amenace la seguridad estructural y consiguiente riesgo de caída, incluso tras el brutal impacto ocasionado en la ciudad por Bernard”.