Así, la asociación ecologista acusa al Ministerio de Medio Ambiente "de haber bloqueado inexplicablemente" las medidas propuestas por la Comisión Científica y de "ir en contra de las resolución de la Unesco" al respecto. Por tanto, WWF ha solicitado al Ministerio que "paralice los dragados" en el caso de que el Puerto "carezca de todos los permisos necesarios para llevarlos a cabo".
WWF ha lamentado en un comunicado que al comenzar los dragados de mantenimiento del Guadalquivir sin contar con la participación de la Comisión Científica, el Puerto de Sevilla "ha demostrado una vez más que trabaja de forma unilateral ignorando absolutamente las necesidades del río en su conjunto". Por ello, la asociación ecologista ha pedido a las "administraciones competentes" que los dragados "se paralicen hasta que esté asegurado el asesoramiento científico independiente para su realización".
Según fuentes de WWF, la Comisión Científica para el Estudio de las Afecciones de las Obras de Dragado del Río Guadalquivir dictaminó el pasado año que el dragado debía "modificar sus condiciones de tiempo, lugar y magnitud, asesorado por conocimiento científico", para minimizar así los "efectos negativos" durante la estación de verano. Asimismo, ha señalado que también la Unesco ha expresado en su último informe de Patrimonio de la Humanidad sobre Doñana la "necesidad" de gestionar el río Guadalquivir con un enfoque "integrado y ecosistémico".
Ante estas advertencias, WWF asegura que tanto el presidente como el director del Puerto declararon en febrero "aceptar" las conclusiones de los estudios y "su voluntad de contar con los científicos" en los dragados. No obstante, la asociación ecologista ha criticado que el dragado "ha comenzado como todos los veranos, organizado unilateralmente por la autoridad portuaria y sin contar con los científicos y con los demás actores implicados en el río", entre los que se encuentra el Espacio Natural de Doñana.
Por otra parte, WWF ha solicitado la copia de la autorización de dragado de mantenimiento del río Guadalquivir, con su pertinente Declaración de Impacto Ambiental (DIA) e informe del Espacio Natural Doñana, y de la autorización para el vertido y acumulación del material resultado de los dragados en las márgenes del río Guadalquivir, en virtud del derecho de acceso a la información en materia de medio ambiente.
WWF considera que si el Puerto no posee todas las autorizaciones necesarias, incluida una DIA, es "urgente" que se paralicen los dragados de mantenimiento por parte de la administración competente. No obstante, la organización ecologista asegura que el Puerto, "como administración pública, debería paralizarlos por sí mismo a fin de dar un estricto cumplimiento de la ley".
Para el secretario General de WWF Juan Carlos del Olmo: "El Ministerio y la Junta de Andalucía no pueden consentir que de nuevo el Puerto de Sevilla tome acciones unilaterales que dañan a la biodiversidad y a la economía del estuario sin contar con otras administraciones ni con los científicos". Y añade: "Los científicos han concluido que los dragados de mantenimiento sólo serán posibles si se hacen de forma diferente a como se han hecho hasta ahora pero parece que el Puerto seguirá haciéndolos como siempre, sin informar y contando sólo con sus propias necesidades, no con las del Guadalquivir".