El suceso tuvo lugar en la localidad de Kfar Nabal, situada en la provincia de Edleb, fronteriza con el Líbano, según el Observatorio Sirio de Derechos Humanos.
Por otro lado, la misma organización indicó que, en un hecho sin precedentes, Damasco fue escenario ayer por la mañana de varias marchas que partieron de la mayoría de sus barrios en solidaridad con los fieles que están cercados por los cuerpos de seguridad en la mezquita Al Rifai, ubicada en la céntrica área de Kfar Susa.
En ese templo, la pasada madrugada una persona falleció acribillada a tiros por los leales al régimen sirio y otras diez resultaron heridas.
Durante la carga policial, los efectivos de seguridad golpearon brutalmente al imán de la mezquita y detuvieron a más de un centenar de manifestantes, denunciaron los denominados Comités de Coordinación Local en Siria.
Ayer por la tarde, unas mil personas permanecían en la plaza de Kfar Susa para exigir la salida de los fieles retenidos en esa mezquita, donde las fuerzas de seguridad han lanzado gases lacrimógenos.
Asimismo, otras protestas se desarrollaron en localidades de la vecina provincia de Rif Damasco en apoyo a los manifestantes sitiados en esa mezquita.
Estos incidentes ocurrieron después de un nuevo viernes de manifestaciones en distintos puntos del país que se saldaron con varias víctimas mortales.
Las organizaciones opositoras elevaron a entre ocho y nueve el número de muertos ayer durante las protestas.
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