Mientras que el Consistorio ha reconocido que el informe de los dos expertos deja de manifiesto “de manera clara e indubitada” que la torre afecta de manera negativa a los tres monumentos declarados bienes Patrimonio de la Humanidad (Catedral, Reales Alcázares y Archivo de Indias), ante lo que ha anunciado que pedirá “encarecidamente” a Cajasol que paralice las obras del rascacielos hasta que se llegue a un “consenso sobre el recorte de altura del edificio” -para que no peligre el sello de Patrimonio-, la entidad financiera ha señalado que no va a renunciar a los 178 metros de la torre establecidos en el trabajo inicial de César Pelli, llegando incluso a pedir el apoyo “explícito” del Ayuntamiento, Junta de Andalucía y Ministerio de Cultura para defender el proyecto ante la Unesco.
Se augura un largo litigio
El alcalde de la ciudad, Juan Ignacio Zoido negociará hoy con el presidente de Cajasol, Antonio Pulido, la modificación del proyecto, que en todo caso pasa “por rebajar la altura de la construcción”. Se busca, por tanto, el consenso, aunque sin “consentir que se pierda la declaración de Patrimonio de la Humanidad”, por lo que si no se llega a un acuerdo, el Consistorio -que ya ha avisado de que no hay nada que rebatir ante la Unesco- ha mostrado su predisposición a iniciar “medidas cautelares” que desembocarían en la paralización de los trabajos, con la consiguiente revocación de una licencia de obra que cuenta con todos los permisos legales y en la que se incluyen informes favorables del Consistorio, Junta y Estado.
Por su parte, la promotora del rascacielos ha mostrado “su convencimiento” de que con “el apoyo de las administraciones” el proyecto es “absolutamente viable”, señalando en una nota que el trabajo de Icomos, en el que han detectado “errores significativos”, es “provisional y no vinculante para ninguna de las administraciones”.
Que todo este asunto no termine en los tribunales y que el Ayuntamiento, y por ende los sevillanos, no tenga que pagar “compensaciones ” a Cajasol por paralizar unas obras legales -la promotora podría pedir hasta 200 millones de euros- depende de que dicho acuerdo “no salomónico” que Zoido persigue llegue a buen puerto.
Icomos recuerda a la Junta “sus competencias” sobre la torre
El Comité español de Icomos reaccionó con un comunicado, firmado por su presidenta, María Rosa Suárez-Inclán Ducassi, una vez que se conoció el informe elaborado por los dos expertos de Icomos Internacional.En dicho comunicado, entre otros alegatos insta al Ayuntamiento a “llevar a cabo la paralización de las obras de la Torre Pelli tal y como se comprometió el pasado otoño”, recomendando al Consistorio que la altura del rascacielos “no sea calculada como el resultado de una negociación económica”, sino en base a “un proyecto serio, elaborado por un grupo de especialistas reconocidos e independientes”.
Asimismo, recuerda a la Junta su “competencia” y “compromiso” en la correcta gestión del patrimonio cultural, resaltando que buena parte de las cuestiones que se señalan en el informe “no competen al Ayuntamiento, sino a la Consejería”, y que “una simple definición de entorno del conjunto histórico de Sevilla habría evitado de raíz todo el problema”.
Paulino Plata “pide celeridad”
El consejero de Cultura de la Junta de Andalucía, Paulino Plata, ha solicitado al Ayuntamiento celeridad para evitar que la capital hispalense pueda entrar en la “lista negra” de la Unesco. En este sentido, manifestó su disposición a “colaborar”, aunque señaló que es el Consistorio el que tiene que tomar decisiones.
Sevilla semueve señala que la ciudad “vuelve a la casilla de salida”
La asociación Sevilla semueve ha reiterado su apoyo a la Torre Pelli y ha señalado que la amenaza de que los tres monumentos pierdan la categoría de Patrimonio de la Humanidad si se construye el rascacielos devuelve a la ciudad “a la casilla de salida” de su imagen contemporánea.
En un comunicado, el presidente de la asociación, José María Bascarán Estévez, lamenta que en Sevilla haya sido habitual que, ante cualquier avance o progreso, “unas pocas voces pseudoautorizadas hayan decidido a puerta cerrada su devenir”.
Ante la amenaza, Sevilla semueve lamenta que “la mayor inversión privada de la ciudad se pueda ir al traste tan sólo porque unas pocas personas con influencia han decidido que Sevilla no merece progresar”. “Nos invade una sensación de impotencia ante la posibilidad de que el proyecto pueda verse paralizado o desvirtuado”, dicen.
Convocatoria de las asociaciones detractoras
La Plataforma contra la Torre Cajasol, formada por asociaciones contrarias a la construcción del rascacielos del arquitecto argentino César Pelli, han convocado para este lunes -a las 12.30 horas en la sala Diego Angulo de la Facultad de Geografía e Historia de la Universidad de Sevilla- una rueda de prensa en la que informarán acerca de “varios aspectos importantes” sobre el problema de la Torre Cajasol, que “entienden que no se están considerando como debieran” en las informaciones al respecto generadas hasta la fecha.
