Así, el concejal delegado de Seguridad Ciudadana, Jesús Mota, que la semana pasada participó con el alcalde Miguel Manella en una reunión de coordinación de los diferentes departamentos municipales que intervienen, ha señalado que cada una de estas visitas de inspección “supondrá el levantamiento del acta correspondiente” para que, previo estudio de las posibles deficiencias que presente el establecimiento, los técnicos municipales tarifeños “determinen las acciones correctivas a realizar y el plazo razonable para ello”.
Según Mota, “habrá lugares en los que sean precisas obras mayores y otros en los que apenas haya que realizar pequeñas correcciones por lo que serán los técnicos los que, con la necesaria flexibilidad, estudien cada caso con detenimiento, siempre con el objetivo fundamental de garantizar la seguridad de los usuarios”.