Alargar, posponer y estirarlo lo máximo posible. Ése es el objetivo marcado por el club racinguista de cara a su futuro más inmediato. Sabedor de no tener el control de éste en sus manos, intenta dominar una situación que debe despejar, con una resolución final, en esta venidera temporada. Los plazos se van cumpliendo y el tiempo, irremediablemente, también va llegando a su fin, y las etapas se van quemando.
La verdad es meridianamente palpable con un hecho demostrable, responder a las deudas es, hoy por hoy, un deseo más que una realidad. La contratación del nuevo técnico llevó consigo la retirada de éste ante la denuncia que arrastraba de 2007. Las escasas opciones de poder cobrar y cansado después de cinco años de eternos juicios, ha prevalecido, finalmente, para allanar su presencia en el banquillo.
Mientras tanto, el bufete de abogados, el club y la administradora concursal, Yolanda Morales, han escenificando varias reuniones en busca de escribir un futuro más halagüeño y tomar las decisiones correctas en busca de hallar luz de forma provechosa.
La puesta en escena es clara, intentar solventar de manera positiva el dictamen final. Las alternativas son dos; y muy diáfanas. Una, subrogar la deuda resultante a la concesión administrativa y que sea ésta la responsable de sufragar el montante deudor. Dicho de otra manera, en una hipotética venta o explotación del estadio y aledaños, y toda vez que dieran beneficios, los acreedores cobrarían. Lejana, remota, pero igual de verídica.
La otra, y la que sigue siendo la que menos gusta en el seno directivo pero la que se tiene como plan b, pasa por una hipotética disolución de la entidad. El club quedaría limpio y las deudas, reconocidas o no, pasarían a ser historia y papel mojado. Es la más efectiva, pero, a priori, es el camino al que, de momento, no quieren llegar.Es por ello que el objetivo es agotar todas las vías para llegar a éste en las mejores condiciones posibles y solventar un año crucial.
Lolo Prado, con la puerta entreabierta
Conoce las intenciones de Mere de no contar con su concurso, aunque desde el propio club le instan a que espere acontecimientos. Está más fuera que dentro, pero prefiere tomarse un tiempo para decidir a buscarse equipo
Las tres bés, únicos en seguir
El serbio Branislav Bajic, el sevillano Pedro Antonio Benítez y el portuense Borja Peinado son los únicos jugadores que tienen asegurada su presencia para el próximo curso, a la espera de las renovaciones y fichajes
Toca esperar: "hay que ir pasito a paso"
“Sin equivocarnos y pensar todo mucho. Hay que ir pasito a paso y buscar algo interesante. Hay ofrecimientos y habrá que esperar a los equipos que juegan liguilla”, señala Javier Zafra