El Cádiz CF no levanta cabeza y en esta ocasión sólo pudo sacar un triste empate en el campo del colista, merecedor del punto en un partido aburrido de principio a fin.
Empezaron bien los locales, ilusionados ante la visita de un histórico del fútbol nacional como el Cádiz CF. Sin embargo, los amarillos fueron poco a poco aplacando ese empuje inicial de los murcianos y fruto de ello llegó la primera ocasión de gol. Un remate de Albentosa a centro de Dieguito fue despejado por el defensa Robles cuando se colaba en la portería.
Oinatz Aulestia atrapó en dos tiempos un centro al saque de una falta. Había que estar atentos a este tipo de jugadas porque en un terreno de juego tan pequeño podrían resultar claves de cara al resultado final.
Dieguito, encargado de poner en juego todos los balones parados, también se esforzaba en centrar cada vez vez que podía en busca de algún remate que permitiera abrir el marcador. Las internadas del puertorrealeño eran lo mejor de un Cádiz CF bien ordenado atrás, pero sin excesivo peligro arriba. Uno de los desmarques del extremo acabó con falta no pitada cuando ni siquiera había recibido todavía el balón.
Ante la falta de ocasiones, lo que sí se veía era un carrusel de tarjetas amarillas, pero todas para el Cádiz CF. La de Garrido fue muy justa por una entrada dura y a destiempo, pero no así las otras tres. Una a Torres por caerse y golpear el balón con la mano, otra a Moke por una falta que no se pita ni en baloncesto y otra a Juan Villar por una jugada con el balón dividido en la que ni siquiera se aprecia golpeo al rival. Lo peor de todo es que esta última conlleva sanción y el 8 cadista no podrá jugar contra el Cartagena.
De nuevo a balón parado llevaron peligro los locales. Una falta botada desde la banda derecha terminó con un cabezazo de Robles al poste. La jugada fue invalidada por fuera de juego que en realidad no lo era, dejando una vez más en evidencia la labor del trío arbitral.
Si la primera mitad había terminado con un susto para los cadistas, la segunda comenzó igual. Diego Torres se llevó a trompicones el balón para plantarse ante Aulestia, pero la rápida salida del meta vasco evitó males mayores.
Avanzaba el tiempo en un encuentro aburridísimo a más no poder. Ninguno de los dos equipos merecía marcar y, de seguir así, sólo un error defensivo o una jugada a balón parado permitiría inaugurar el marcador de El Mayayo.
Conforme pasaba el tiempo, los locales comenzaban a dar por bueno un punto ante el, en teoría, mejor Cádiz. Pero los amarillos no estaban confirmando esa teoría para nada, jugando un partido lamentable en todas sus líneas. Como no podía ser de otra forma, el que no se conformaba era el cuadro gaditano, en el que Alberto Monteagudo decidió meter arriba a Viyuela, Nico Varela y Adrián Gallardo para refrescar las ideas y las piernas.
Sin embargo, un minuto después de entrar Gallardo en el terreno de juego el Cádiz CF se quedó con diez. El paraguayo Edison Torres fue amonestado por segunda vez, esta vez sí de forma justa, y se volvió a ir antes de tiempo del partido. Y pudo ser peor, porque ya en el último minuto Viyuela le soltó un codazo a su marcador que ni siquiera fue sancionado como falta.
Sólo la falta falta de calidad local evitó un disgusto mayor para los amarillos, desquiciados, sin saber atacar y volviendo a ser una playa en zona defensiva. Al final, los nulos méritos ofensivos de unos y otros condenaron el partido a lo inevitable, el empate sin goles que para unos es un éxito y para otros un fracaso.
- Ficha Técnica -
UCAM Murcia CF: Ricardo, Pina, Robles, Quesada, Berengüi, Tete, Álex Cruz, Rodri, Diego Torres (Mateo, 74’), De Gomar (Fran Minaya, 45’), y Pico.
Cádiz CF: Aulestia, Moke, Albentosa, Garrido, Bermúdez, Fall, Edison Torres, Juan Villar (Adrián Gallardo 83’), Indiano (Nico Varela, 69’), Dieguito (Viyuela, 78’) y Belencoso.
Árbitro: Collado López (Colegio castellano-manchego). Amonestó con tarjetas amarillas a Moke (m. 30), Juan Villar (m. 34), Garrido (m. 39), Tete (m. 47), Aulestia (m. 56) y Ángel Robles (m. 75). Expulsó por doble amonestación a Edison Torres (m. 21 y 84). No sancionó una agresión de Viyuela en los minutos finales.
Incidencias: Partido correspondiente a la jornada número siete del campeonato de liga en el Grupo IV de Segunda División B. 450 espectadores, algunos seguidores cadistas en las gradas.