El alcalde de Chiclana, Ernesto Marín, ha firmado el bando municipal que regula la celebración de los cotillones de fin de año en la ciudad, ya sea en establecimientos fijos o eventuales, promovidos por particulares o entidades. Tal y como marca la ley, corresponde al Ayuntamiento otorgar las autorizaciones tanto a las personas físicas como jurídicas que decidan organizar tales festejos. Por este motivo, se han decretado una serie de normas que buscan garantizar la seguridad de estas tradicionales fiestas.
En primer lugar, todas las entradas deberán estar selladas por la Policía Local y no se podrá poner a la venta un número superior al aforo determinado. Concretamente, en la entrada deberá aparecer la siguiente leyenda “esta entrada no será válida sin el sello original de la Policía Local”. En todos los casos, se fija el día 30 de noviembre como último día para la presentación de solicitudes.
En el caso de establecimientos públicos con licencia o actos de comprobación posterior, es decir, hoteles, salas de fiesta, salones de celebraciones con música y discotecas, no estarán sujetos a la obtención de la preceptiva autorización siempre que no se modifiquen las condiciones por las que se le concedió la autorización.
Por el contrario, los establecimientos públicos con licencia que no ampare estas celebraciones, restaurantes, bares, pubs, o aquellos sin licencia municipal, deberán presentar un proyecto técnico elaborado por un técnico competente que, entre otros informes, incluya un manual de autoprotección y un plan de emergencias de evacuación, así como un seguro de responsabilidad civil.
Antes del 10 de diciembre deberá presentarse en la Gerencia Municipal de Urbanismo, un certificado del técnico competente del colegio profesional correspondiente que recoja el cumplimiento de todas las medidas incluidas en el proyecto técnico y la subsanación de las posibles medidas correctoras impuestas.
Quienes deseen más información sobre este tema, cuentan con un enlace en la página web municipal, www.chiclana.es.