Sobre “los pequeños retoques de los vicios ocultos”, el edil recordó que “el constructor está obligado a llevar a cabo las reparaciones que procedan durante un año, hasta que se produzca la recepción definitiva de las obras”.
Por tanto, Gabriel Orihuela afirmó que por parte del departamento que encabeza, "llevaremos a cabo una visita al yacimiento arqueológico junto con personal del Instituto de Empleo y Desarrollo Tecnológico (IEDT) del organismo provincial", por lo que "posiblemente en febrero se lleve a cabo el acta de entrega de todo el recinto, así como del centro de interpretación de los restos meriníes, situado frente al conjunto".
La puesta en valor del conjunto está presupuestada en más de 2.110.000 euros y se complementa con la un centro de interpretación de la cultura meriní, por valor de 600.000 euros.