Según el calendario de plenos acordado por la corporación, sería mañana jueves cuando debería haberse celebrado la sesión plenaria de este mes, con carácter ordinario. Dado que es fiesta local, la sesión se ha adelantado a este miércoles, pero la convocatoria ha sido extraordinaria, con lo que el pleno ha sido de mero trámite, realmente rápido.
En poco más de media hora, sin embargo, un nuevo concejal ha entrado a formar parte de la corporación municipal, y ha dado tiempo a adelantar un debate sobre los futuros presupuestos, tras que la oposición haya cargado contra algunos recortes previstos, así como a corregir la polémica subida de la tasa por mesas y sillas.
EL NUEVO CONCEJAL
El pleno comenzó con la toma de posesión de Ángel Vázquez como nuevo concejal del grupo municipal andalucista, en sustitución de Daniel Harillo, quien dimitió a finales de diciembre tras dejar claro su enfrentamiento personal y distanciamiento con Isabel Barriga. Tras ello, Vázquez ha jurado su cargo con el nerviosismo propio en estos casos. Acompañado por su familia, recibía la medalla de concejal de manos de la alcaldesa de la ciudad, Mari Paz Fernández.
Según se supo la semana pasada, Barriga le ha propuesto para dirigir Participación Ciudadana y Parques y Jardines.
Ángel Vázquez, de 47 años de edad, casado y con dos hijas, trabaja como empleado de banca e inició su militancia en el PA en el año 2000.
Además de su faceta política, siempre ha estado muy vinculado con el movimiento cofrade de la ciudad y fue durante cuatro años el hermano mayor de la Hermandad de la Virgen de la Cabeza.
RECORTES PRESUPUESTARIOS
Durante el pleno, la oposición ha reclamado a la alcaldesa que aclare si el nuevo presupuesto mantendrá los recortes decretados en el presupuesto prorrogado, y que afectan al capítulo de personal, con una reducción del cinco por ciento, y a las transferencias a sociedades y patronatos, previstas en los capítulos 2 y 4, recortadas un 25 por ciento.
Fernández, que dijo la semana pasada a la prensa que el decreto era puntual y sólo afectaba al presupuesto prorrogado, hoy ha sido algo más explícita ante una también explícita pregunta de Izquierda Unida. Así, tras asegurar Paqui González que "nos tememos que estos recortes sean la línea a seguir en los nuevos presupuestos", la alcaldesa no ha negado que "hay que hacer ajustes, y los habrá, porque no podemos gastar más de lo que no tenemos". La alcaldesa ha anunciado que el nuevo presupuesto se aprobará en el próximo pleno.
CORRIGEN LA TASA
Por otra parte, el pleno ha corregido la tasa por ocupación de vía pública con mesas y sillas. Así, tras y como se prometió a los empresarios, se han aprobado las modificaciones consensuadas con los propietarios de bares y restaurantes, tras que estos declararan la guerra al Ayuntamiento y anunciaran incluso, rebeldemente, que no tributarían ante una subida del 257 por ciento.
La concejal de Hacienda se excusaba en el pleno: "La pretensión era actuar ante las quejas de quienes no podrían transitar por las calles entre las mesas y las sillas". Y si bien es cierto que en esa modificación en el concepto tributario estuvo el problema, al comenzar a calcularse los pagos en función de metros ocupados y no por elementos colocados en la calle, la oposición quiso llegar al fondo del asunto. Así, el PSOE reclamó saber "¿dónde ha estado el error?", tras que el equipo de Gobierno admitiese en su día que nunca se pretendió un subida tan importante y que todo se debió a un error de cálculo debido a esa modificación en la filosofía de la tasa. Teresa Valdenebro recriminó en todo caso al equipo de Gobierno: "Pero si la intención aquí también no es recaudar más, sino controlar que haya espacios libres en las calles, la solución no estaba en subir la tasa, sino en autorizar mejor los espacios, vigilar más y sancionar más a quienes incumplen". Álvaro Carreño, de IU, añadió que "lo advertimos. Y ahora dan marcha atrás, porque metieron la pata. Y proponemos que no suban ningún impuesto, porque con la crisis que vivimos no es el momento de hacer pagar más", dijo.
Tanto PSOE como Izquierda Unida reclamaron además que se solucione el conflicto con otros colectivos como los quiosqueros, que estos días han denunciado un incremento en los recibos del 1.000 por cien a consecuencia de la modificación en la tasa que regula su actividad. El equipo de Gobierno no quiso entrar en este debate, si bien quiosqueros que se habían dado cita en el salón de plenos aplaudieron las intervenciones de la oposición.
