El ministro de Orden Público griego, Nikos Dendias, ha reconocido que las fotografías de los cuatro sospechosos detenidos por su participación en dos atracos a sucursales bancarias fueron manipuladas para disimular sus magulladuras. Los atracos fueron perpetrados en Velventos, en el norte de Grecia.
Dendias ha explicado que se retocaron las fotografías de tres de los cuatro detenidos para que éstos fueran reconocibles y ha anunciado una investigación sobre cómo se originaron esos hematomas y un "castigo implacable" si se demuestran abusos, según declaraciones dle ministro a la cadena Mega TV recogidas por la edición digital del diario 'Kathimerini'.
El domingo el departamento que dirige Dendias publicó un comunicado en el que asegura que las heridas sufridas por los sospechosos se produjeron durante su detención, el pasado viernes, mientras eran reducidos por policías tras una persecución. Los atracadores iban armados.
Dos de los detenidos estarían vinculados al grupo armado de extrema izquierda Conspiración de las Células del Fuego, responsable de una serie de atentados contra edificios públicos y policías en los últimos años.
La oposición ya ha criticado la "tortura" sufrida por los detenidos. "La tortura de personas bajo custodia policial es una desgracia en el Estado griego. Ni siquiera la dirección del Ministerio puede creer que se trata de un incidente aislado", ha denunciado la Coalición de la Izquierda Radical (SYRIZA).
También Izquierda Democrática (DIMAR), socio de la coalición de Gobierno, ha criticado los hechos. "El terrorismo es el enemigo de la sociedad y la democracia debe enfrentarse a él con decisión, pero la democracia no debe buscar venganza. Es necesario que se investigue y se explique por qué sus caras están deformadas debido a los golpes", ha señalado el grupo en una comunicación oficial.