El Caja Laboral ganó (81-70) con el mínimo esfuerzo a Bruixa d'Or Manresa, y con esta derrota el equipo catalán certifica su descenso a la Liga LEB Oro cuando restan aún cuatro jornadas para concluir la fase regular.
Los manresanos llegaron a Vitoria con la imperiosa necesidad de sumar la victoria para impedir el descenso y estirar la agonía, pero, aunque estuvieron siempre cerca en el marcador del Caja Laboral, entregaron el partido en tres minutos.
En el minuto 33, los visitantes se llegaron a colocar a solo cinco puntos de los locales (61-56), pero ahí se desfondaron y encajaron un parcial de 13-1 que rompió el marcador (70-57), y esa fue ya la ventaja que supo gestionar y controlar Caja Laboral para no ver peligrar el triunfo.
Con este triunfo los vitorianos están a una sola victoria de consumar también su segundo puesto en la fase regular.
El Caja Laboral arrancó a medio gas tras las emociones europeas y relajó su defensa ante Bruixa d'Or Manresa que aprovechó las concesiones para anotar desde la línea de tres puntos sus cinco primeras canastas: 21-15.
Hanga fue el único manresano en convertir una canasta de dos, en el minuto nueve, mientras Causeur, San Emeterio y Milko Bjelica fueron la inspiración local antes de llegar a cerrar el primer acto con un nuevo triple de De Vries, que puso a los alaveses 25-20.
El segundo cuarto bajó de revoluciones con solo cinco canastas entre los dos equipos en los primeros cinco minutos (31-24), y sin encontrar estabilidad ni ritmo debido a las continuas perdidas y errores en el tiro de unos y otros.
Un parcial más propio de categorías inferiores en el segundo cuarto: 11-11, permitió llegar a los catalanes a rebufo de un Baskonia sin tensión (36-31).
Pleiss asumió el liderazgo en la reanudación para intentar romper el partido y evitar agobios. Con los puntos del alemán y San Emeterio, el Baskonia alcanzó su máxima renta. Un 50-35, en el minuto 25, tras el primer triple local del partido anotado por Causeur.
El Bruixa d'Or Manresa se aferró al clavo ardiendo de ganar en el Buesa para estirar su agonía en la Liga Endesa y llegó a enjugar la desventaja hasta dejarla solo en ocho puntos (60-52), al final del tercer cuarto.
Siguió apretando el cuadro de Jaume Ponsarnau hasta situarse 61-56, en el minuto 33, ante un Baskonia que no lograba aplicar la velocidad idónea al duelo.
Recuperó el técnico del Caja Laboral Tabak al inspirado Causeur y la lucha interior de Tibor Pleiss y ahí aplicó Caja Laboral un parcial de 13-1 que le disparó a 74-57, en el minuto 37, que ya fue la losa que enterró las ilusiones manresanas de supervivencia en la ACB.
