Fuentes de la empresa apuntaron que el accidente se produjo a las 9.50 horas, cuando se produjo un contacto entre escoria líquida y un suelo humedecido.
Según indicaron, la explosión levantó algunas placas de la cubierta de la acería y una parte “relativamente pequeña” de la pared también resultó afectada.
Al tener conocimiento del suceso dieron aviso al Centro Coordinado de Emergencias, haciendo hincapié en que “lo que más preocupaba es que se hubiesen producido daños personales”.
En este sentido, señalaron que las dos personas que se encontraban cerca de la explosión fueron conducidas al servicio médico existente en la factoría.
Allí procedieron a lavarlos, ya que estaban impregnados de polvo de escoria, comprobando que “no tenían ningún tipo de herida”.
En este sentido, estos dos empleados fueron derivadas a la mutua para que les sea realizada una audiometría “para descartar que la explosión les haya afectado al oído”.
Asimismo, se someterán a una evaluación médica para evitar que el polvo de escoria penetre por ojos, boca, fosas nasales u oídos, subrayando que se trata de un procedimiento “rutinario y normal”.