Por cuarto año consecutivo, Ecologistas en Acción ha colocado en la playa urbana de Sanlúcar, el tramo comprendido entre Bonanza y Las Piletas, la Bandera negra por los vertidos contaminantes a la playa y al litoral.
Los ecologistas, que han denunciado esta situación ante la Fiscalía, señalan que los vertidos de las aguas residuales se producen directamente al mar a través de los arroyos Salto del Grillo y San Juan, llegando a verter entre 4 y 5 hectómetros cúbicos al año, con excepción de los meses de verano. En marzo de 2010, según explican las mismas fuentes, se concedió al Ayuntamiento de Sanlúcar una autorización de vertido que daba un plazo de dos años para la eliminación de estos emisarios submarinos.
En la misma línea, los ecologistas han puesto de manifiesto el "mal funcionamiento" de la Estación Depuradora de Aguas Residuales (EDAR) Guadalquivir, ubicada en La Jara, señalando que, según datos de 2012 de los datos de control realizados por la Consejería de Agricultura, Pesca y Medio Ambiente, el 95% de las muestras sobrepasan los máximos legales de contaminación y el 37% tienen niveles contaminación cuatro veces superiores al máximo permitido. "Tan altos que técnicamente son aguas residuales", señalan desde Ecologistas en Acción.
Además, denuncian que desconocen los efectos contaminantes sobre el litoral cercano debido a que el plan de vigilancia sobre el litoral que recibe el vertido "que es una obligación legal del Ayuntamiento, no se ha dado a conocer". Sin embargo, aluden a la calificación de las aguas de baño de estas playas publicadas en el informe preliminar de aguas de baño de la temporada 2013, que conceden una calificación de "insuficiente" a la playa de Bonanza - Bajo de Guía y "suficiente" para la playa de La Calzada. Los ecologistas llaman la atención sobre el hecho de que aquellas playas que son calificadas con un estado "insuficiente" de sus aguas de baño, deben estar señalizadas, informando de las causas de la contaminación y las medidas adoptadas.
Por otro lado, llaman la atención sobre las diferencias de datos entre los análisis realizados por la Consejería de Medio Ambiente y los ofrecidos por el Ayuntamiento de Sanlúcar, llegando a denunciar incluso una posible falsificación de los datos por parte del Consistorio. De ahí que hayan puesto en conocimiento de la Fiscalía provincial de Medio Ambiente de Cádiz estos hechos, reclamando la eliminación de los vertidos y la sanción a los supuestos responsables, el Ayuntamiento y la empresa Aqualia - FCC.
