La RFEF dictará el lunes sentencia sobre la categoría en que se jugará

Tensa espera. El Xerez sabrá definitivamente el lunes si juega en Segunda División B o si la Real Federación Española le envía a Tercera después de que la plantilla no quedase finiquitada el pasado día 31 de julio.
El silencio administrativo es total tanto en el Xerez como en los estamentos federativos. AFE sí conectó el pasado viernes, por la tarde, con los jugadores y les indicó que será el lunes cuando se tome la decisión definitiva y que, mientras tanto, les aconsejó que no participen en entrenamientos ni en encuentros amistosos, al mismo tiempo que les comunicó que, en caso de descenso administrativo, todos quedarían libres, algo que asume la propia asesoría deportiva del club ya que los contratos se hicieron para jugar en Segunda División B y nunca en Tercera.
Es más, hay jugadores que, a través de sus representantes, ya tienen vistas algunas cosas. Adri Cuevas, porque se llegó a interesar el Córdoba, tiene una oferta del Cartagena que dirige Luis Tevenet; Góngora podría marcharse al Guijuelo; Javi Casares tiene un ofrecimiento del San Fernando, equipo en el que ya jugó con anterioridad, y el destino de Gonzalo Poley podría ser el conjunto de su tierra, el Atlético Sanluqueño. Toni podría tener también ofertas al igual que Hugo y Vega, mientras que el canterano Bicho podría recalar en un equipo filial de nuestra comunidad.
Pero hay más. Adrián, lateral derecho que ha estado a prueba, ya sabe que no entra en los planes de David Vidal y se ha marchado. El belga Tanguy había recibido el visto bueno para firmar e, incluso, iba a estampar su firma el pasado viernes, pero todo ha quedado paralizado. Igualmente el mediocentro Cristián Hernández, igualmente a prueba, iba a firmar y todo ha quedado paralizado hasta saber qué es lo que ocurre en la jornada de mañana lunes.
La programación deportivas ha quedado totalmente parada. Ya el pasado día 30 se informó que quedaba todo parado hasta ver en qué categoría quedaba el equipo, ya que se llegó a jugar con la opción de que una carambola, en forma de descensos multitudinarios desde Segunda, diesen la opción de recuperar la categoría perdida,. Se decía eso el pasado día 31 y por la noche la noticia es que el equipo se metía en el pozo de la Tercera División.
A lo largo de la jornada del lunes se anunciaron dos ruedas de prensa. Una iba a ser a las 12.30 horas en Chapín y se anuló hasta las 19 horas. La iba a ofrecer el secretario del consejo de administración Francisco Gallardo, aunque la vespertina quedó también anulada a la espera de que las gestiones que se están haciendo por parte del grupo Energy y, especialmente, por parte de Ricardo García puedan fructificar, ya que Gallardo hablaba de que “no ha sido un problema de dinero, sino de actitud, que es otra cosa. Desde que hemos llegado no hemos hecho otra cosa que poner dinero y lo explicaremos todo. El equipo no es de Tercera porque la RFEF no nos ha notificado nada, solo la Liga”.
Gallardo apunta que “ el grupo está usando todas las medidas posibles para revertir la situación en cuanto al comunicado emitido el pasado día 31. No voy a decir nada, estamos trabajando y ya  notificaremos”.  Gallardo insiste en que  “el dinero  de la deuda a los futbolistas estaba garantizado y la situación igual no se conoce del todo. Hablaremos y contaremos la situación real y todo lo que ha pasado” y argumentaba que  “la LFP igual no ha contado toda la verdad”.
Eso sí anuncia que el descenso administrativo no tiene por qué conllevar la disolución del club, a pesar de que se podría llegar a Tercera con una deuda de más de 20 millones de euros.   “Estar en Tercera no es inviable. No estamos dispuesto a pedir la disolución porque se podría jugar en Tercera si llegamos a un acuerdo con Hacienda y Seguridad Social”.
De momento hay que esperar los acontecimientos oficiales de mañana lunes.