Los bailaores que estarán en la jornada de hoy en el Teato Villamarta a partir de las nueve de la noche con el espectáculo titulado Cádiz de la Frontera, en el que ambos expondrán las características de los bailes de ambas poblaciones, tan cercanas y, a veces, tan estúpidamente enfrentadas por fanatismos recíprocos, por insensateces que impiden encontrarse en un punto de la cultura común, Andalucía, que une y vertebra esos pequeños matices diferenciadores que no deben convertirse en compartimentos estancos, sino en fórmulas de enriquecimiento en la idiosincrasia del pueblo flamenco, que está siempre por encima de cualquier veleidad absurda.
Este espectáculo podría romper barreras y categorizar la supremacía del sentimiento colectivo, la identidad de pertenencia a una cultura muy arraigada y que debe unir siempre, no separar jamás.
Para la ocasión actual, Andrés y Pilar repasarán una introducción musical al violín, temas libres de Cádiz y Jerez, tanguillo, bulería, zambra (violín), pregón de Macandé, trilla, malagueña del Mellizo, de Chacón, vidalita y milonga (con la colaboración coreográfica de Manuel Betanzos), cantiñas, soleá, guajira (violín), seguiriya, final bulerías (Cádiz-Jerez, en homenaje a la Perla de Cádiz y Paquera de Jerez).
Para todos estos temas, el elenco estará compuesto por un cuerpo de baile en el que se insertarán María Moreno, Lorena Franco, Alejandro Rodríguez y Juan Manuel Zurano; al cante, David Lagos, David Palomar y May Fernández, entre otros; las guitarras de Javier Patino y Keko Baldomero y el violín de Bernardo Parrilla.
La tradición cantaora de los pueblos de Jerez de la Frontera y Cádiz se mezclan en Cádiz de la Frontera, donde aparecerán sones de Ignacio Espeleta, Aurelio Sellé, La Perla, Enrique El Mellizo, Pericón, Chano Lobato, por la parte de la Tacita de Plata; por la de la Campiña, Lola Flores, Manuel Torre, Terremoto, Agujetas, Sernita...
Enclaves de mar y viñas, donde las personas han trabajado duro desde tiempo inmemorial por la conformación de unas señas que engloben a ambos pueblos, sin dejar de tener las propias, pero ampliando el horizonte: la fraternidad es imposible lograrla a escala planetaria si a tu vecino más cercano, con el que compartes sueños, frustraciones, anhelos, arte, risas y llantos, es decir, la vida, no le concedes la categoría de igual.
Porque Cai es Jerez y Jerez es Cai. Obsérvese que son las personas las que hacen las ciudades y todos los seres humanos tenemos sentimientos, así que, este título debe contribuir a la unión de las ciudades.
En otro orden de cosas y como quiera que el Festival no se agota en las representaciones del espacio central que es el Teatro Villamarta, también la Sala Compañía ofrecerá hoy la ocasión para ver en liza a la bailaora sevillana Ángeles Gabaldón, que trae a Jerez su finción denominada Del Quivir, propósito que se inicia con un relato histórico por un paseo por el Río Grande, el Guadalquivir, una arteria fluvial de saber histórico.
Tartesiso, fenicio, romano, árabe, judío, romaní... todas las civilzaciones que han conformado Andalucía. No que pasaron, porque parece que cuando esto se dice no hicieron más que una visita de pura cortesía a nosotros.
¿Quiénes somos sin ellos? ¿Qué seríamos? ¿Seríamos simplemente? Una jornada, la novena, para disfrutar con unas cuantas propuestas que se escenificarán en ambos espacios escénicos.
