Inexorable el camino del Betis hacia la Segunda División del fútbol español, las semanas se hacen tan largas como las diferencias con los rivales directos en la tabla inmersos en la pelea por eludir los puestos de descenso.
El desastre para muchos ya está consumado si además se tiene en cuenta la nefasta racha de resultados que atraviesan los verdiblancos; la peor en la historia del club.
Catorce partidos sin ganar en Liga ofrecen una visión estadística y fría del escaso bagaje del equipo de las trece barras a lo largo del campeonato. Once derrotas frente a Getafe, Elche, Atlético, Málaga, Barcelona, Sevilla, Real Sociedad, Almería, Osasuna, Real Madrid y Celta y tan solo tres empates contra Levante, Rayo y Valladolid.
Aciaga lista que comparten Pepe Mel (ocho), Juan Carlos Garrido (cinco) y Gabriel Calderón (una) en sus respectivas etapas al frente del conjunto heliopolitano. Este último, como en el caso anterior con el valenciano, no pudo estrenarse de manera oficial con una victoria, ni siquiera con un punto en el casillero, pues sucumbió por otra nueva goleada dando una vez más muestras del pobre nivel de una plantilla que se acerca a la cincuentena de tantos encajados (47 en concreto).
Asimismo, desde que en la Liga se instaurara los triunfos por tres puntos, el Betis es el segundo peor colista de Primera en los anales, igualado con el Xerez de la 2009/2010; si bien el Sporting de la campaña 1997/1998 se lleva la palma con sólo tres puntos tras 21 jornadas disputadas. En el primer caso, terminó bajando con 34 puntos pese al tremendo arreón de la segunda vuelta motivado por la llegada del técnico argentino Gorosito.
La cuenta atrás se hace cada vez más cuesta arriba y los más escépticos en el beticismo ya esperan únicamente el día que la caída, al menos, se produzca con dignidad.
