Con la presentación del lateral francés Kolodziejczak en la jornada de ayer concluyó un nuevo y movido capítulo de fichajes en el seno de Nervión. Un verano en el que han llegado hasta diez caras nuevas, quizás excesivas pero sinónimo de las importantes salidas que una vez más han tenido lugar. Diez fichajes que no terminan de convencer a una afición que ha visto como en apenas dos meses les han arrebatado hasta tres pilares de la pasada campaña: Rakitic, Alberto Moreno y quizás el más doloroso, el de Federico Fazio. Lo cierto es que la inversión en el capítulo de fichajes (alrededor de los 15 millones) ha estado muy por debajo de los ingresos en ventas, que ascienden a los 60 millones de euros. Además, algunos como Barbosa, Arribas, Banega o Aspas, vienen generando algunas dudas en la afición y en el propio plantel técnico.
Pero aún hubiera podido ser peor si anoche termina por concretarse un presunto interés del Arsenal sobre el goleador Carlos Bacca, que según diversos medios anunciaban que el conjunto londinense terminaría pagando la cláusula del colombiano. Eso sí, en el último día de mercado el club fue capaz de quitarse de encima la losa de Rusescu, que vuelve al Steaua, de donde nunca debió salir.
Con todo ello, las dudas vuelven a planear sobre Nervión, pero no es menos cierto que hace ahora un año pocos apostaban por este equipo para terminar alzando su tercera UEFA. El tiempo determinará la suerte de Monchi, de Emery y del Sevilla.