El equipo de los Estados Unidos tomó la delantera en el marcador de la Ryder Cup 2014, que se está disputando en el recorrido de Gleneagles (Escocia), después de imponerse en los 'fourballs' matinales de este viernes, donde el español Sergio García perdió su partido junto al norirlandés Rory McIlroy.
No fue un estreno positivo para el equipo de Europa, que dejó escapar sendos medios puntos en el hoyo 18, entre ellos el de sus dos mejores jugadores del ránking mundial, que se estrellaron ante la sólida pareja que conforman Phil Mickelson y Keegan Bradley.
McIlroy y García no jugaron a su mejor nivel, sobre todo el de Holywood, mientras que los americanos estuvieron, como en Medinah en 2012, muy firmes pese a que desperdiciaron dos hoyos de ventaja y que un fallo inesperado de 'Lefty' en el 15 les puso uno abajo.
Pero los dos estadounidenses mantuvieron la calma, sobre todo Bradley, que con grandes golpes igualó la contienda en el siguiente hoyo. Todo se tuvo que decidir en el 18, pero dos erráticos golpes del británico y el español y dos buenos de sus rivales permitieron a los de Tom Watson una victoria de mucha moral para acabar por delante esta primera tanda.
Otro duelo que se le fue a los de McGinley en el 18 fue el de Thomas Bjorn y Martin Kaymer ante Jimmy Walker y Rickie Fowler, aunque el mal fue 'menor' al perder solamente medio punto. Sin embargo, el danés y el alemán llegaron ir al inicio de partido tres arriba y dos por delante de cara a los tres últimos hoyos, pero apareció un inspirado Walker para salvar el empate.
En cambio, en los otros dos partidos de estos 'fourballs' se registraron dos victorias contundentes para cada uno de los bandos. En el que abría la Ryder Cup, Justin Rose y Henrik Stenson fueron implacables ante Bubba Watson y Webb Simpson, a los que ganaron 5 y 4 sin ceder ningún hoyo.
Por su parte, los 'rookies' americanos Jordan Spieth y Patrick Reed, a base de 'birdies', se impusieron por idéntico resultado al debutante Stephen Gallacher y a Ian Poulter, que saboreó la derrota en la competición tras siete triunfos seguidos y después de haber sido vital en 2012.
