El representante del secretario general de la ONU para Libia, Bernardino León, ha avisado este lunes de que el conflicto en este país puede crear condiciones para que el grupo terrorista Estado Islámico (EI) "encuentre espacio para crecer y crear bases mucho más importantes".
En declaraciones a la Cadena Ser recogidas por Europa Press, León ha explicado que esa de una de las preocupaciones de la ONU en caso de que se prolongue el conflicto. Así, ha explicado que aunque la guerra en Libia no es entre islamistas y no islamistas, sino más bien de corte tribal, sí que hay cierto elemento de islamismo radical en el bando de Trípoli y Misrata, "y las fronteras entre ese grupo y los representantes del EI no están bien definidas".
Además, ha detallado que aunque en el conjunto del país no hay una presencia numerosa de miembros del EI, sí que la hay "cualitativamente importante" en la ciudad de Darna, en el este del país, donde existe un líder de origen saudí que actúa como jefe militar y civil y está intentando extender la presencia de EI a otras zonas.
León también ha relatado varios ataques yihadistas que se han producido en los últimos días --aunque algunos son obra en Ansar al Sharia y no de EI--.
El representante de la ONU ha confirmado que finalmente no se celebrará la reunión que iba a comenzar este lunes entre representantes del Gobierno reconocido internacionalmente, establecido en Tobruk (este del país) y el autoproclamado en Trípoli. Eso sí, ha matizado que no es un aplazamiento de última hora porque no llegó a anunciarse oficialmente dado que se sabía que iba a ser difícil celebrarlo.
Según ha dicho, la ONU sólo convocará diálogo político si hay cierta expectativa de éxito, y en la actualidad hay una dicotomía entre los poderes políticos y los poderes militares, que son los que toman decisiones sobre el terreno y han optado por recrudecer los ataques.