Consciente de que las penurias económicas del Ayuntamiento le impiden sacarse de la manga ningún as para ilusionar a los ciudadanos, el alcalde de Jaén, José Enrique Fernández de Moya, se agarra a un arreón inversor en micropolítica en la recta final del actual mandato para revalidar el triunfo del PP en las elecciones de mayo. Ayer, el regidor jienense vendió nuevamente un paquete de obras que verán la luz en los próximos meses por valor de 20 millones de euros, aunque no tenga reparo en incluir obras de la iniciativa privada o de otras instituciones.
“Es el primer alcalde especializado en apropiaciones indebidas al adjudicarse como propios proyectos que el PSOE puso en marcha la anterior legislatura o aquellos que la iniciativa privada invierte en Jaén, todo con tal de que no se note que en 4 años no ha hecho nada en Jaén”, le afeó la portavoz socialista, María del Mar Shaw.
Tras la reunión de coordinación del equipo de gobierno, Fernández de Moya aludió nuevamente a proyectos como el centro deportivo de La Victoria, por 8 millones de euros (de la iniciativa privada; la remodelación del Parque de La Alameda, con 2 millones de euros de inversión cofinanciados al 80% por la UE; el plan de asfaltado en una treintena de calles, entre ellas Vicente Montuno; las llaves de las 21 viviendas de alquiler con opción a compra que Somuvisa promueve actualmente en la calle Los Caños; el Centro de Servicios Sociales Comunitarios del Bulevar; o la intervención en la calle Juanito el Practicante y Molino de la Condesa.
De otro lado, el Consistorio ha alegado ante Cultura en el uso del granito para la remodelación de la calle Carrera de Jesús “dar continuidad así a la Plaza de Santa María”.
Fernández de Moya confirmó que el Pleno de finales de este mes de enero aprobará los Presupuestos de 2015. Antes, el borrador se remitirá esta semana al Ministerio de Hacienda, con quien el Ayuntamiento negocia nuevas medidas de liquidez, y la próxima semana se enviará al Consejo Económico y Social de la Ciudad (CES). El mantenimiento del empleo público, la micropolítica y las políticas sociales serán los ejes del Presupuesto, según dijo el alcalde.
“El PSOE quiere cargarse la Catedral”
El alcalde de Jaén, José Enrique Fernández de Moya, se mostró ayer convencido de que la amenaza del alcalde de Baeza, el socialista Leocadio Marín, de retirar el apoyo a la declaración de la Catedral de Jaen como Patrimonio Mundial “es una estrategia diseñada desde el PSOE para cargarse la Catedral de Jaén”. El regidor jienense reiteró que, si el alcalde baezano consuma su amenaza, “el pleno de Jaen le dará cumplida respuesta, pero no a la ciudad de Baeza, sino al señor Marín”. Fernández de Moya dijo que esperará a la reunión del grupo de trabajo de la Catedral del día 12 para ver cuál es la actitud de la Junta, la Diputación y del Ayuntamiento de Baeza.
Del “tranviazo” al estudio oculto
El alcalde lamentó ayer el rechazo de la Junta a la catalogación del tranvía de Jaén como transporte metropolitano, como adelantó VIVA JAÉN. “Está claro que la Junta no sabe qué hacer con el tranvía después de haber gastado 120 millones, y como me dijo el expresidente José Antonio Griñán el tranvía es un tema endemoniado”, dijo Fernández de Moya al valorar la negativa al carácter metropolitano por parte de la Junta. Además, acuñó un nuevo término, el “tranviazo” para alertar de la intención del PSOE de priorizar el tranvía si llega al gobierno municipal. “Quieren endosarle la ruina a los jiennenses y este alcalde no lo va a consentir”, dijo.
Mientras, la Delegación de Fomento rechazó ayer “todas las excusas falsas y maniobras tramposas del PP para mantener paralizado el tranvía" de Jaén. El delegado , Juan Antonio Sáez, anunció el envío de una comunicación oficial al alcalde "solicitándole de nuevo, dos años después de la primera petición, el informe sobre la infraestructura y la gestión del tranvía elaborado por Ferrocarriles de la Generalitat de Cataluña (FGC)".
Se trata de “un informe crucial” cuya “ocultación continuada a la opinión pública es inaceptable”. La Consejería insiste en que, tomando como referencia la demanda de 2,7 millones de usuarios al año, el coste real para el Ayuntamiento se situaría en torno a 2,6 millones de euros anuales, y no los 6 que esgrime el alcalde. Fomento elevó a 5,22 millones la deuda municipal por la dirección de obra y el arrendamiento de los vagones.
