Cabe recordar que, en fechas posteriores, desde el Gobierno andaluz se avanzó que las gestiones para lograr que una compañía retomara la actividad industrial en las instalaciones algecireñas continuaban “por buen camino”.
Sin embargo, nada parece concretarse por el momento. Aún así los ex trabajadores de la fábrica mantienen la esperanza de verse reubicados y comenzar a trabajar para otra empresa.
De hecho, fuentes próximas a la compañía indican que “desde la vía sindical se les está transmitiendo que las gestiones van por buen camino. La factoría mantiene los permisos y las instalaciones se siguen manteniendo, lo que es una buena señal”.
Estas mismas fuentes afirman que “Torraspapel mantiene a ocho empleados en labores de mantenimiento en la propia fábrica”.
Paralelamente, el director general de industria de Torraspapel, Juan Manuel Collado, aseguró que “el solar continúa en venta. La empresa LPC ha estado interesada hace unos nueve meses pero en este momento no tenemos ningún tipo de contacto”.
Con todo, Collado avanzó que “hay abiertas otras vías. De hecho, hay tres organizaciones interesadas. No podemos aventurar un plazo para el cierre de alguna de las ofertas. A nosotros nos gustaría llegar a buen puerto pero es un asunto complejo ya que las instalaciones son muy grandes”.
En esta línea, desde la compañía se refuerza la idea de que “la prudencia es fundamental en estos momentos”. A la par, Torraspapel descartó la posibilidad de retomar la actividad en la planta con otra producción como se había barajado ya que “no está contemplada”.
Rechazo a implantación
Por otro lado, el colectivo ecologista Agaden, la Plataforma de Ciudadanos Rodeados de Fábricas y un grupo de vecinos del Acebuchal, Los Pinos y La Menacha han emitido un comunicado en el que rechazan la posible implantación de actividad industrial pesada en los terrenos de la antigua fábrica papelera.
Así, “ante las últimas publicaciones y las declaraciones de la Junta y el Ayuntamiento sobre la instalación de la transnacional LPC en la antigua Torraspapel, queremos trasladar nuestra oposición a la instalación de cualquier industria pesada en esta zona”.
Según este grupo, “nuestra oposición se basa en la lógica, la razón y el bienestar de los vecinos. Los terrenos donde se encuentra la antigua Torraspapel, están hoy día del entorno urbano, rodeados por barriadas como el Acebuchal, Los Pinos y la Menacha. Los vecinos afectados coinciden con nuestra oposición ya que viven una gran preocupación por la posible llegada de una nueva industria de dudosa responsabilidad”.
Así, este colectivo no ve “lógico que tras la lamentable marcha de Torraspapel se instale una nueva industria pesada mas contaminante y de peores condiciones de seguridad y calidad laboral como es LPC”.