El Pleno del Ayuntamiento de Sevilla, en sesión ordinaria, ha aprobado una moción urgente, planteada por IU, en la que se acuerda mostrar el apoyo de la corporación municipal a las movilizaciones y a la huelga convocada por los trabajadores autónomos, de contratas y subcontratas de Telefónica-Movistar "en defensa de sus derechos y de unas condiciones laborales dignas".
Además, ha instado a la compañía a que renuncie al nuevo contrato que "pretende imponer a la plantilla, ya que éste aumentará todavía más la precariedad de este colectivo", mientras que ha acordado que el Ayuntamiento se dirija a la dirección de la empresa para facilitar unas negociaciones "reales y efectivas destinadas a garantizar los derechos de la plantilla y evitar el empeoramiento de sus condiciones laborales".
La moción aprobada señala que en Sevilla son alrededor de 300 los trabajadores que están afectados por esta situación, entre el personal de las contratas, subcontratas y autónomo, y explica que el nuevo contrato a partir de mayo supone "un nuevo recorte en el pago de baremos por trabajo realizado y, al mismo tiempo, aumenta la precarización de un colectivo que actualmente ya sufre condiciones laborales y salariales intolerables".
Según detalla, "los trabajadores denuncian condiciones laborales de semiesclavitud, con jornadas de entre 12 y 14 horas, cuando sus contratos apenas reflejan cuatro, salarios que no superan los 700 euros al mes, vacaciones no remuneradas, entre otros". A esto, suma que las contratas "no pagan los desplazamientos hasta el hogar de los clientes de la empresa, por lo que son los operarios y técnicos los que han de sufragar estos gastos de su propio bolsillo".
"Esta realidad contrasta con la boyante situación de una compañía que ha obtenido en 2014 un beneficio empresarial de 3.000 millones de euros, con un incremento del 40 por ciento, y que recientemente ha anunciado, además, una nueva subida de tarifas que no repercutirá en la plantilla", sentencia.
Los trabajadores reclaman la derogación de este contrato y, mientras tanto, el cumplimiento del convenio del sector, en el que se contempla el pago de un sueldo fijo, jornadas de trabajo de ocho horas, pagas extraordinarias, vacaciones remuneradas, pago de jornadas en festivo y fines de semana, etcétera.
El colectivo pide además que la empresa dote al trabajador de todos los recursos necesarios para llevar a cabo su labor, tales como vehículo para desplazamiento, combustible, móvil y herramientas; así como formación a cargo de la empresa y eliminación de penalizaciones al trabajador.