Málaga es una ciudad accesible, de acuerdo con el decálogo elaborado por la Red de Ciudades por la Accesibilidad. Una plataforma impulsada por la propia administración local que agrupa a 80 municipios de todo el país y que aspira a ser referente de los más de 8.000 restantes para avanzar en esta materia.
El decálogo no incluye el aspecto pendiente de mejora en la capital: crear empleo entre las personas con diferentes capacidades.
Contar con una concejalía propia, un plan estratégico, una ordenanza, una oficina de orientación, emprender campañas de sensibilización o disponer de un fondo local de promoción son algunos de los puntos, en concreto, son los seis primeros, que integran el decálogo resultante del encuentro de los miembros de la Red de Ciudades para la Accesibilidad. Una cita que acogió la capital el pasado abril y en el que participaron 160 expertos en la materia.
El decálogo, presentado este lunes, incluye además la elaboración de un protocolo de actuación cuando se detecten problemas de accesibilidad en entornos, productos o servicios, la creación de un sello municipal que destaque los espacios más accesibles y constituir una comisión de evaluación y seguimiento de todas las medidas planteadas.
Pero siempre hay aspectos que mejorar. Los ayuntamientos del norte de España están más avanzados que el malagueño en otra materia: la creación de empleo entre las personas con algún problema de accesibilidad.
Esta red permite la difusión de soluciones a los problemas de accesibilidad de las ciudades a través de una página web: red.laciudadaccesible.com. Cada municipio integrado aporta sus propios ejemplos. En el caso de Málaga, un ejemplo lo constituye el Museo del Automóvil.
La Red de Ciudades Accesibles está abierta a la colaboración de todas las entidades y organizaciones que quieran favorecer el cumplimiento de los principios establecidos en la Convención Internacional sobre los Derechos de las Personas con Discapacidad.
