El número de fallecidos por un ataque ayer de las fuerzas del régimen de Bachar al Asad, apoyadas por la aviación rusa, en el centro de Siria ha ascendido a 60, entre los que hay civiles, según el último recuento difundido hoy por el Observatorio Sirio de Derechos Humanos.
La ONG señaló que entre los muertos hay 30 menores y mujeres, y 17 combatientes de facciones rebeldes que perdieron la vida por la ofensiva terrestre del Ejército sirio y los bombardeos rusos en varias zonas del norte de la provincia central de Homs.
El jueves, las fuerzas armadas sirias lanzaron un ataque contra la ciudad de Telbise, uno de los principales bastiones rebeldes de la mitad septentrional de Homs, y otros lugares próximos.
Por otra parte, el Observatorio indicó que aviones rusos efectuaron en la mañana de hoy cuatro bombardeos en las inmediaciones de esa localidad, así como en los pueblos de Ganto y Tir Maleh.
Mientras, prosiguen los combates entre los soldados sirios y los insurgentes en la periferia de Telbise y cerca de puestos de control del régimen en las zonas de Jinifis y Qobeh al Kurdi.
Desde el 30 de septiembre, Rusia, aliada del régimen de Damasco, realiza una campaña de ataques aéreos en Siria en su primera intervención militar directa en el conflicto en el país árabe desde su comienzo en marzo de 2011.