La Asociación Provincial de Empresarios Transportistas y Agencias de Málaga (Apetam) ha advertido de que más de 30 empresas de este sector se están viendo perjudicadas por la remodelación urbanística del polígono industrial Villa Rosa de la capital. De hecho, se están planteando la salida de este espacio productivo e, incluso, el cierre o los despidos, ante la imposibilidad de encontrar nuevas áreas para sus operaciones. Hasta 400 puestos de trabajo podrían verse afectados.
Ante esto, Apetam continúa a la espera de llegar a una solución consensuada, tras varias reuniones con responsables del Ayuntamiento de la capital y de la empresa concesionaria de las obras, acerca de la nueva planificación urbana y de circulación del polígono industrial Villa Rosa, en la zona de Guadalmar.
Las obras, ya en marcha y que están encaminadas a la construcción de nuevas naves industriales, hacen "imposibles", incluso, los accesos de los autobuses, autocares y minibuses a las cocheras de las empresas de transporte que allí trabajan desde hace décadas, según ha señalado a Europa Press el presidente de Apetam, Juan Sierra. Se calcula que unos 200 de estos vehículos maniobran diariamente por esas vías para salir y entrar de la zona.
El trazado de este polígono se realizó en 1997, pero no se ha ejecutado hasta ahora y la normativa para el desarrollo urbanístico de nuevas áreas ha cambiado mucho desde entonces. Y es que una de las principales vías de la zona se está acotando a un espacio de 10 metros cuando la norma actual establece que haya casi el doble.
El presidente de Apetam ha instado a que la Gerencia Municipal de Urbanismo (GMU) respete el trazado espacial actual de 14 metros, que permanece desde la construcción del polígono, y que, incluso, lo amplíe para que las empresas de transporte tengan total garantía de acceso y maniobrabilidad. Las compañías que llevan más tiempo en la zona aseguran que estas dimensiones dejarían ámbito suficiente a las nuevas construcciones.
Este punto es clave para muchas de las firmas de transporte escolar y discrecional de la provincia, y los impedimentos para la realización de las rutas y las puestas a punto de los vehículos "están siendo ya palpables", según Sierra. Además, se espera que, de no llegar a una solución antes, el problema se agrave a la finalización de las obras, "con una notable falta de aparcamiento".
MESA DE TRABAJO
Apetam ha puesto en conocimiento del Ayuntamiento, de los responsables de la obra, así como de la Asociación de Polígonos Industriales y Comerciales de Málaga (Apoma), la urgencia de establecer una mesa común de trabajo para abordar las necesidades de las partes y llegar a un acuerdo, de modo que todas las empresas, las que ya trabajan allí y las que se quieren instalar tras la remodelación, puedan desempeñar sus tareas con normalidad.
Para el presidente de Apetam, "lo que venimos reclamando desde que empezaron estas obras es que las empresas que ya están allí trabajando colaboren de manera conjunta con el Ayuntamiento y la constructora para que la circulación no se convierta en un caos en ese punto clave para la ciudad, tanto para el tráfico habitual como para los autobuses que tienen allí sus cocheras".
"Necesitamos voluntad por parte de todos para que se puedan realizar las obras sin afectar a la dinámica de las empresas que llevan décadas trabajando en la zona", ha manifestado Sierra, opinando que "es un acuerdo fácil de alcanzar con voluntad".
