El Ángel Ximénez cayó por 33-24 ante el BM Guadalajara en el partido del estreno del nuevo técnico Javier Cabanas en el banquillo pontanés. El encuentro resultó equilibrado durante los primeros minutos, si bien pronto el conjunto visitante cobró ventaja en el marcador, gracias fundamentalmente al acierto de José Cuenca, autor de seis tantos durante el primer acto. El equipo mantuvo la intensidad defensiva y el acierto en ataque, pero los alcarreños aguantaron el tipo y nunca le perdieron la cara al partido. Uno de los momentos claves de la primera mitad llegó con la descalificación, con roja directa, del brasileño Ales Silva, una jugada que propició una superioridad que los visitantes, que en ese momento marchaban por delante en el marcador, no supieron aprovechar. Esta situación dio alas a los locales, que se encomendaron en las paradas de Hombrados para igualar el choque, llegándose al descanso con 13-13.
En la continuación, el Guadalajara salió mucho más enchufado e intenso, lo que les permitió ponerse por delante en el electrónico y abrir una renta más que interesante. El Ángel Ximénez no supo reaccionar ni tampoco encontró la fórmula para superar una defensa local férrea y contudente que no dio resquicio alguno, y que se apoyó en las buenas intervenciones del veterano portero internacional. Los errores en los lanzamientos y las pérdidas de balón fueron una rémora para el equipo pontanés, que se vio arrollado por el contraataque local, donde un inspirado Chiuffa batía una y otra el marco visitante. El 33-24 final supone un resultado preocupante, ya que más allá de la derrota y de las sensaciones negativas, implica una diferencia de goles excesiva ante un rival que podría ser rival directo de los pontanenses en la lucha por la permanencia.
